San Cristóbal de Las Casas.- Las hermanas Marcela y Perla Díaz Carachure, se han convertido en las dos mujeres embalsamadoras “profesionales” en el estado de Chiapas, quienes anteponiendo a su familia, han dado atención a cientos de difuntos, pues consideran que las mujeres deben “desarrollarse profesionalmente sin miedo a nada”.
“Es un gusto y a la vez una tristeza que seamos muy pocas las mujeres que nos dedicamos al embalsamamiento de manera profesional en el estado de Chiapas. Es muy importante que nos profesionalicemos, que perdamos el miedo, la mujer es muy capaz de desarrollarse de desempeñarse en cualquier profesión y cualquier oficio”, dijo Marcela.
El sector funerario está marcado por el desempeño del género masculino, estamos tratando de cambiar eso
“Creo que el sector funerario y embalsamadores es un sector marcado por el desempeño del género masculino que el femenino, pero nosotras estamos tratando de cambiar eso. El profesionalizarse te ayuda a tomar las medidas de precaución, saber usar el equipo de protección personal, las técnicas para poder realizarlo”, refirió Perla.
Explicó que para desempeñar esta labor se debe tener conocimientos de química, bioquímica, biología, anatomía y otros, para poder brindar un embalsamiento profesional, sin contar que se debe contar con un espacio adecuado, el cual ellas han tratado de tenerlo en la Funeraria San Cristóbal “porque cada vez hay nuevas enfermedades, nuevas técnicas y debemos innovarnos”.
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Marcela Díaz reveló que a parte de tener la maestría en Derecho, es licenciada en Histotecnólogo y Embalsamador, y aclaró que al realizar esta actividad no se le quita ningún órgano al cuerpo, desmintiendo ciertos tabúes que se han creado por la población, ya que eso es la necropsia y solo personal autorizado por la fiscalía o Ministerio público lo realiza, “nosotros solo tratamos de preservar tejidos y órganos”.
“El embalsamador profesional no te pregunta para cuántos días, por que un embalsamado profesional, así lo veles un día, una semana, quince días, un mes, debe preservar el cuerpo. Hemos tomado cursos en el extranjero, por la pandemia se nos canceló uno en Estados Unidos, pero estamos en pie de esa capacitación constante, porque no es cualquier cosa lo que nos dan, es el cuerpo de una persona, un ser querido que están despidiendo y debe tratarse con todo el respeto, con todos los conocimientos necesarios”, aclaró.
“Muchas veces los funerarios y embalsamadores profesionales a veces dejamos de lado nuestras familias porque no hay hora ni fecha para este tipo de sucesos y muchas veces anteponemos a los dolientes que a nuestra familia”, concluyó Perla Carachure.