A casi tres años de iniciar la construcción de las nuevas instalaciones del hospital del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Tapachula, con una inversión superior a los 600 millones de pesos, la obra está inconclusa y la clínica Dr. Roberto Nettel Flores presenta daños estructurales por falta de mantenimiento.
La obra del hospital del ISSSTE en Tapachula inició en octubre de 2021 durante la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador y se proyectó concluir en un plazo de 8 meses, con la intención de garantizar una atención a más de 115 mil derechohabientes de la región, pero hasta el momento todo quedó en buenas intenciones.
Se pretendía que de las 36 camas censables con las que cuenta la clínica, al ser reestructurada y ampliada se convirtiera en un hospital de segundo nivel que contaría con 56 camas y 18 especialidades, incluyendo neurología, nefrología y cirugía cardiovascular.
Tortuguismo en la construcción
Aunque no hay una versión oficial del ISSSTE, obreros en la construcción argumentan que la tardanza se debe supuestamente por un problema que hubo con la primera constructora que estuvo a cargo y que es originaria de Monterrey, Nuevo León y que dejó los trabajos abandonados.
Integrantes de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), lanzaron un ultimátum al gobierno federal para que se concluyan los trabajos del nuevo hospital del ISSSTE.
La secretaria general del FSTSE Tapachula, María Cristina Pérez, dio a conocer que es lamentable que aún no se terminen los trabajos después de 3 años y que no se cumpla con los contratos de obras y fechas de entrega.
"La exigencia de los trabajadores es que haya intervención de la dirección general para que en el marco legal, los contratistas y constructoras cumplan en tiempo y forma con la entrega del edificio que es una urgencia el que esté en funcionamiento", abundó.
Clínica se cae a pedazos
Mientras la dirección general del ISSSTE incumple con la entrega del nuevo hospital, las instalaciones que operan actualmente se caen a pedazos, afirmó la jefa de quirófano, Sara Valdepeña Sánchez.
Dijo que las lluvias han evidenciado las pésimas condiciones en que se encuentra el hospital Roberto Nettel Flores del ISSSTE, lo cual representa un riesgo, para pacientes y el personal.
Señaló que en las instalaciones “llueve más adentro que afuera, ante la gran cantidad de goteras que hay en el techo, por lo que el personal tiene que colocar cubetas para recoger el agua que filtra”.
Detalló que esta situación mantiene preocupados a los trabajadores y en especial a la representación sindical, ya que trabajan en situaciones peligrosas, inseguras que representan riesgos y que además impiden dar un servicio adecuado a la población.
"En días pasados circularon fotografías en redes sociales que ponen en evidencia la situación que existe, cuya problemática año con año la han manifestado, pero no son corregidas por la delegación Chiapas, ni por la nacional", abundó.
Indicó que hay preocupación por esas condiciones en las que se trabaja, ya que la lluvia que se cuela genera riesgos, las lámparas se desprenden de los techos también, lo que son situaciones que se arrastran desde años anteriores.
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"La clínica del terror"
La jefa de quirófanos Valdepeña Sánchez, calificó a este nosocomio como el "hospital del terror", ya que está totalmente rebasado en su capacidad y falta de mantenimiento, cuando debería ser un hospital de salud y bienestar.
Expresó que la salud es un derecho universal y a pesar de ello, se está violentando a los derechohabientes debido a las deficiencias que presenta el hospital, lo que representa un peligro no sólo para los pacientes sino también para los mismos trabajadores.
"En este hospital no se cuenta en el área de quirófano con aire o respirador que es lo básico para una intervención médica, por lo que es necesario que a las autoridades piensen en la gente que se está dejando de atender con calidad, ya que la vida de los pacientes está en riesgo", sentenció.
Subrayó que tampoco hay medicamentos, ni insumos básicos ni atención especializada, por lo que los derechohabientes tienen que surtir sus propias recetas o bien ser atendidos en clínicas particulares.
Demandan mejorar atención
El magisterio de Chiapas otorga al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) más de 26 millones de pesos a través de los descuentos que les hacen, sin embargo, la atención es pésima, nunca hay medicamentos, ni médicos especialistas, mucho menos cirugías debido a que los quirófanos están inservibles.
El secretario de organización del SNTE - CNTE, Gabriel Díaz Ordóñez, puntualizó que están en todo el derecho de exigir una atención médica de calidad, ya que cada quincena de manera puntual les descuentan las cuotas médicas, las cuales no se reflejan en la atención que reciben.
Remarcó que tan sólo en Chiapas son 52 mil maestros quienes de manera quincenal aportan 200 pesos, cuyos recursos alcanzan para hacer más eficiente el servicio en la clínica hospital, pero desconocen a dónde van a parar sus aportaciones.
"Lamentablemente no se le da buen manejo a los recursos que aportan los trabajadores, por ello, en la clínica existe desabasto de medicamentos e insumos que impactan de manera negativa en la atención de los pacientes", acotó.
Mencionó que desde hace más de un año las cirugías están suspendidas, porque el quirófano no está funcionando, debido a que no se cuenta con aire acondicionado, situación que ha provocado que muchos pacientes tengan que acudir a clínicas privadas para su atención.
"La exigencia va a fondo y dejamos en claro que no vamos a seguir tolerando la corrupción en este hospital, porque no nos explicamos cómo es que no llegan los medicamentos a los derechohabientes, cuando nosotros estamos constantemente pagando cada quincena", finalizó
