El director de la Reserva de la Biósfera Volcán Tacaná, Francisco Javier Jiménez González, anunció un importante incremento en las poblaciones de pavones y quetzales, dos de las especies más emblemáticas de la región. Este logro es resultado de los esfuerzos de conservación y manejo sostenible que se llevan a cabo en esta área natural protegida.
Explicó que, en el caso del pavón, hay tres individuos por cada kilómetro cuadrado de la reserva, pero solo en las zonas donde está presente la especie, ya que no se encuentra en las áreas altas y medias.
“Esta población ya es relativamente estable, ya que no se tiene reporte de cacería de esta especie. Lo mismo ocurre con el ave emblemática del quetzal en las zonas donde se distribuye, así como con el chipe rosado en los bosques de pino”, expresó.
Añadió que estos registros se han obtenido a través de cámaras fotográficas y cámaras trampa colocadas en la reserva, las cuales permiten conocer la población de las especies de animales y los avances en la conservación de la reserva.
Precisó que aún hay problemas con especies como venados, mapaches y tejones, ya que la población los acusa de causar algún tipo de perjuicio, aunque este problema ha disminuido con el tiempo.
“Los depredadores naturales en la reserva que están causando más daños son las aves rapaces, como el águila de penacho —la más grande de la zona—, así como gavilanes y halcones, que saquean los nidos”, abundó.
Destacó que las afectaciones por la mano del hombre aún persisten, pero gracias a los trabajos de concientización con las comunidades, estas han disminuido significativamente en comparación con años anteriores.
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Comentó que hace 10 años había reportes de extracción de pavones y otras especies para venderlas en el mercado negro, situación que no ocurre desde hace varios años en la reserva.
Puntualizó que todos estos avances se deben a la colaboración de la población, que también está poniendo de su parte para salvaguardar la flora y fauna de la Reserva de la Biósfera Volcán Tacaná, trabajando en conjunto con la CONANP.