A través de un posicionamiento emitido este 5 de Noviembre, el Instituto Nacional de Migración (INM) califica como imprecisas, irresponsables e incorrectas las acciones y declaraciones de los autodenominados líderes de la caravana migrante que partió de Tapachula, Chiapas, el pasado 23 de octubre.
El documento señala que tanto el líder de la organización Pueblos Unidos Migrantes, Irineo Mujica Arzate, como el coordinador del Centro de Dignificación Humana A. C. Luis Rey García Villagrán, mienten al afirmar que el objetivo de las personas en caravana es regularizarse de lo contrario ya hubieran aceptado la propuesta que el INM les hizo hace algunos días.
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Además aseguran que el INM ha desatado una violencia física y psicológica e impulsa una campaña de xenofobia en contra del contingente, cuando la autoridad ha cumplido con su responsabilidad de buscar salvaguardarles su integridad física y les ha ofrecido regularizarlos, trasladarlos a albergues de puertas abiertas y proporcionarles documentos para que acrediten su estancia regular en México.
De acuerdo al documento ambos líderes son los que no han permitido directamente la interlocución con los migrantes, actitud que citan “parece más cercana a la de los traficantes de personas o ‘polleros’, que ponen en riesgo la integridad y vida de la población migrante”.
Sobre la salud de los migrantes de la caminata que presentan diversos síntomas de enfermedades, pero no son diagnosticadas o atendidas de manera adecuada, especialmente niños, adolescentes y mujeres embarazadas, el INM lamenta que sean estos líderes los que obstruyan y descalifiquen las propuestas para regularizar a estas personas, lo que hace estos tengan animadversión hacia la autoridad.
Desmintieron que sea intención del INM separar a las familias, pues se les ofreció regularizarlos con las Tarjetas de Visitante por Razones Humanitarias a menores de edad, embarazadas, enfermos, personas con alguna discapacidad y a los que tienen resuelta de manera positiva su solicitud de refugio, así como a sus familiares.
Cita que han acusado al INM de represor, cuando los Grupos Beta los acompañan y auxilian, respetando sus derechos humanos, para lo cual se ha pedido la presencia de observadores de las comisiones nacional y estatal de los Derechos Humanos quienes vigilan la caravana.
Además señala que han falseado la información al señalar que el INM desea rescatarlos y devolverlos a sus países de origen cuando la propuesta es totalmente opuesta; mientras incluso presumen que el juez de amparo les otorgó el libre tránsito, pero no exhiben alguna resolución jurisdiccional en ese sentido.
Según el documento se ha atendido a personas enfermas y lesionadas, mientras Irineo Mujica Arzate, arbitrariamente obligó a un migrante a bajar de una ambulancia para ser retornado a la caravana, mismo que se agravó y tuvo que ser atendido y conducido nuevamente en una ambulancia por los Grupos Beta del INM hacia un hospital, e irresponsablemente convenció a una mujer embarazada, así como a los familiares de menores de edad con sospecha de padecer dengue, a no ser atendidos e incorporarse al contingente.
Asimismo indica que las personas enfermas han sido atendidas en sitio por personal médico de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y elementos de los Grupos Beta del INM, lo que se confirma en su negativa a que se otorgue protección humanitaria a quienes marchan en la caravana, a quienes desde el inicio se les ofreció la emisión de tarjetas humanitarias, especialmente para las personas en situación vulnerable, incluyendo a los familiares que viajan con ellas.
Mienten al señalar que se incumple con la entrega de tarjetas a los solicitantes de refugio, y como prueba el periodista de nacionalidad nicaragüense, Carlos Fernando Padilla, quien cubría la travesía de la caravana y recibió del INM la Tarjeta de Residente Permanente, al momento de exhibir su resolución positiva ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
Los promotores de la caravana han dicho que marcharán a la Ciudad de México para exigir la regularización de su condición migratoria, pero también han expresado que a como dé lugar, ya sea con amparos y documentos migratorios o incluso sin ellos, intentarán llegar a la frontera norte.
Según el documento son estas propias declaraciones las que evidencian que el objetivo no es la regularización de las migrantes para permanecer en México, sino un interés personal, engañando, manipulando y usurpando la voluntad de esta población.
Finalmente el INM reitera su compromiso de promover una migración ordenada, segura y regular, tal como establece la ley, para lo cual reitera el ofrecimiento de otorgar tarjetas humanitarias a quienes marchan en la caravana en oficinas de estados como Campeche, Oaxaca, Guerrero, Hidalgo, Querétaro y Morelos, sin necesidad de que pongan en riesgo su integridad y vida al ser conducidos a la Ciudad de México, a fin de demandar lo mismo que ya el instituto les ofrece.