“Por favor, déjennos pasar, sólo queremos llegar a los Estados Unidos”, es la suplica de cuatro jóvenes hondureños que lograron cruzar el río Suchiate y burlar el cerco migratorio y de seguridad que ha sido colocado por el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Guardia Nacional (GN).
Caminaron más de 20 kilómetros hasta llegar cerca del municipio de Metapa, pero no contaban con toparse con un retén de la GN y el INM, improvisado en el kilómetro 21 de la carretera que conduce de Ciudad Hidalgo a Tapachula.
Allí acabó el sueño de los cuatro hondureños y una bebé que aún carga en brazos su madre, angustiada porque ya no podrían seguir caminando.
Los desalentados extranjeros suplica, imploran porque los dejen seguir caminando, pero los agentes migratorios emiten un rotundo no. Después les regalan dos botellas de agua para que se hidraten, de lo contrario pueden padecer un golpe de calor por las temperaturas que asedian a la frontera sur.
“La policía de Guatemala nos quitó todo, celulares, cartera, dinero y hasta nuestras mochilas, venimos sin nada y solo queremos llegar al norte, déjennos pasar por favor”, explica uno de los jóvenes que anda sin camisa.
No hay más que hacer, los migrantes intentan negociar un regreso a Ciudad Hidalgo, pero para los agentes del INM es imposible concederlos eso. -¿Van a caminar de regreso todo ese tramo?- cuestionan, a lo que responden que no hay alternativa, que regresarán.
Pero el retorno puede ser letal bajo el sol que cae a quemarropa y a más de 35 grados centígrados. Así que no hay vuelta atrás, se acabó el viaje y el sueño de un mejor futuro.
Los cuatro jóvenes, vigilados por la mirada estoica de los militares, ascienden a uno de los vehículos oficiales del INM, allí aguardan por espacio de 20 minuto y después salen hacia su destino prioritario: la Estación Migratorio Siglo XXI, al norte de Tapachula, desde donde serán deportados en próximas horas a su natal San Pedro Sula.
Las detenciones en carreteras del sur de Chiapas han comenzado desde que se instaló el cerco de seguridad en la frontera con Guatemala. Horas atrás, un grupo de al menos 15 haitianos fue retenido en el puesto de inspección El Manguito, a dos kilómetros de Tapachula.
A lo largo de 55 kilómetros, tres retenes de vigilancia migratoria operan para detectar a los extranjeros que busquen introducirse a territorio nacional de manera ilegal. La contención comienza a tomar forma, con detenciones y un disminución en el flujo de personas en la ribera del río que divide a ambas naciones.