En el marco del día internacional para la reducción de los desastres, en Chiapas como en el resto del país se ha dejado entrever la falta de acciones encaminadas a minimizar los riesgos especialmente derivados de los desastres naturales, así como generar una cultura sobre la prevención y preparación ante fenómenos naturales.
El académico e investigador de la Universidad Autónoma de Chiapas Vicente Castro evidenció que en el caso de Chiapas existen regiones que tras el paso del fenómeno Stan, quedaron en estado de indefensión pues los fenómenos que han sido subsecuentes continúan causando estragos que siguen sin ser atendidos.
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“No hay planeación, no hay trabajo de manejo de costas para minimizar el impacto de huracanes; existe un pendiente en relación al programa de manejo costero, como del programa de atención y mitigación al cambio climático, como una de las medidas para reducir afectaciones causadas por temas hidrometeorológicos”, aseveró.
Puso como ejemplo, el caso de los ríos en la costa de Chiapas a los que se les destruyó los “meandros, (curvas que hacían los ríos para reducir fuerza del agua), cuando se hicieron trabajos de rectificación, es un pendiente porque eso ha sido la causa de erosión en las partes altas y medias, lo que genera azolvamiento en las zonas bajas, así también las corrientes de estos afluentes son mucho más fuertes en temporada de lluvias.
En este contexto, destacó que lo ideal para la reducción o mitigación de riesgos, se debería trabajar en la construcción de los “meandros”, para minimizar la fuerza del agua, con ello evitar en gran medida su poder destructivo.
“Otras obras que deberían trabajar la autoridad, pero no lo hace, son presas filtrantes como vasos reguladores a nivel de micro cuentas para que la cuenca grande no tenga esa magnitud de volumen de agua y fuerza cuando se vienen los fenómenos hidrometeorológicos."
Remarcó, que de nada sirve conmemorar estas fechas porque no hay trabajos de prevención, es decir no existe un trabajo basado en inteligencia ambiental para poder reducir impactos por los fenómenos hidrometeorológicos, no sólo en Chiapas sino en todo México y otros países.
“En el quehacer científico a esto se le denomina manejo climáticamente inteligente, porque se tienen que manejar las cuestiones terrenales para que el clima sea benévolo, sin embargo, el estado y municipios no tienen estrategia clara, siguen pensando en sus periodos y no les interesa lo que venga atrás, es decir no hay planeación a mediano y largo plazo”, puntualizó.