Unión Juárez es uno de los municipios más visitados del Soconusco por turistas internacionales, nacionales y locales, esto debido a los grandes atractivos con los que cuentan, entre los que destaca “La Casa Braun” o “La Casa Grande”, que está llena de historia, cultura y un impresionante diseño arquitectónico que llama la atención de propios y extraños.

Esta joya de la arquitectura moderna se empezó a construir en el años de 1920 por su propietario, el alemán Enrique Braun, quien compró la finca "Santo Domingo" a principios del siglo, pero que después le fue despojada por el Gobierno federal.

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En “La Casa Grande” se plasma la cultura de Alemania y todavía se encuentra en su arquitectura de madera mucho de su esplendor, así como de su origen extranjero de sus fundadores que llegaron de Europa a esta región.

“La Casa Braun” o “La Mansión Braun” como también se le conocía por los pobladores de la finca "Santo Domingo”, ubicada en el ejido homónimo del municipio de Unión Juárez, representa el ejemplo mejor logrado de la arquitectura habitacional desarrollada por los colonizadores extranjeros llegados al Soconusco.

Esta gran obra de arquitectura alemana elaborada en madera prefabricada traída de Estados Unidos, cuenta con sótano, ático, planta baja y planta alta

En la planta alta se localizan dos amplias recámaras finamente decoradas con estampados florales con estilo modernismo y murales con aves de la región, éstas últimas se ubican en el pasillo que liga a las recámaras a un tercer local dispuesto para un privado o cuarto de esparcimiento.

Cada recámara cuenta con un guardarropa y un mueble de baño dentro de su mismo espacio, al centro de estos dos cuartos se localizan las escaleras que conducen al ático dentro de él se vuelve apreciar la forma en cruz casi simétrica. El espacio es apenas iluminado por ventilas que rematan cada ala y se aprecia la estructura de madera que soporta la cubierta principal, la cual fue terminada en lámina acanalada de fierro laminado.

Hasta la fecha aún se ve lo que en su momento fue una gran finca cafetalera de principios del siglo pasado, con su camino de palmeras reales, la casa grande, las dependencias para trabajadores, las instalaciones para el proceso del café de calidad y altura que se sigue dando en este municipio enclavado en las faldas del volcán binacional Tacaná.

Historia, mito o leyenda de Adolfo Hitler y la Casa Braun

La vinculación a la Casa Grande o Braun con Adolfo Hitler se da por quien fue su pareja de nombre Eva Braun, con quien se casó un día antes de que ambos se suicidaran encerrados en un bunquer y posteriormente sus cuerpos fueron quemados.

Alguien vínculó de alguna manera el momento que Eva estaba de viaje por Centroamérica, cuando iba rumbo a Sudamérica, específicamente a Argentina y desde entonces se vincula a la casa construida por Enrique Braun.

Los comuneros explican que fue un párrafo de un mensaje escrito que se envió a las fuerzas de Adolfo Hitler a Europa de parte de un mariscal de Alemania que acompañaba a Eva Braun, en su viajes por Centroamérica sin precisar en que punto se encontraba, Guatemala, Honduras, El Salvador o Nicaragua.

La mayoría de la población empezó a crear historias, mitos, relatos y leyendas entre la Casa Braun con la pareja sentimental de uno de los hombres más poderosos de la Alemania, quien estableció un régimen totalitario durante el periodo conocido como Tercer Reich o la Alemania nazi.

En la realidad el alemán que construyó la casa no tiene ningún parentesco con Eva Braun, ya que el solo tuvo un hermano y ninguno de los dos tuvo una hija con el nombre de la que en su momento fue amante y posteriormente esposa de Adolfo Hitler, quien fue el culpable de millones de muertes durante los 12 años del período nazi y de propaganda de odio.

El tema de Adolfo Hitler y la Casa Grande fue más bien tomado como publicidad para que los turistas llegaran a disfrutar de esta importante obra arquitectónica hecha por un alemán y que tenía los apellidos de la compañera de vida de este personaje reconocido a nivel mundial.

Hasta el momento no se tiene una evidencia de las leyendas e historias que se han contado de la llegada de Eva Braun a la casa que también se le conocía años atrás como la mansión Braun, pues se habla que este hogar fue usado como un bunker de Hitler cuando era buscado por sus enemigos.

Un atractivo turístico

Actualmente la Casa Grande o Braun representa el ejemplo mejor logrado de la arquitectura habitacional desarrollada por los colonizadores extranjeros llegados al Soconusco, el cual está abierto para que cientos de turistas internacionales, nacionales y locales pueden disfrutar, ya que cuenta con bar, restaura, pequeño museo, alberca y hermosos jardines donde pasan ratos agradables los visitantes.

Actualmente son más de 80 socios ejidatarios; cuatro directamente administrador la casa e invitan a las vacacionistas a disfrutar de un hermoso lugar en donde el calor de su gente, la gastronomía, cultura e historia termina de enaltecer al ejidos Santo Domingo.

Este lugar es un casco de lo que en su momento fue una de las fincas más impotentes de café de la región del Soconusco y la casa fue construida en la década de los veinte por el alemán Enrique Braun Hansen.

La Casa o Mansión Braun fue rescatada en 1997 para enriquecer el patrimonio cultural de la región, es una construcción con influencia arquitectónica alemana y norteamericana, con una decoración elaborada a base de madera.

Sólo basta asomarse a los corredores de La Casa Grande para admirar la belleza de la naturaleza y el impresionante volcán binacional Tacaná, que comparten México y Guatemala desde el principio de su historia.

Algunas de las actividades que se pueden practicar en sus bellos alrededores son el senderismo, fotografía, excursiones de observación geológica, paseos a caballo y el agroturismo, por mencionar algunas.

Para llegar a este lugar se recorren aproximadamente 34 kilómetros en carro particular o transporte público, desde la ciudad de Tapachula por carretera pavimentada en dirección a Unión Juárez., Tramo Tapachula - Unión Juárez.

Visitante

Víctor Manuel García, quien llegó a disfrutar de este lugar con la familia, mencionó que es un sitio maravilloso que te conecta con la naturaleza, la tranquilidad y la paz que se busca luego de una jornada laboral pesada en la ciudad.

“Es un lugar increíble, escuchar el canto de las aves, perderse entre el jardín, rodearse de la naturaleza y tranquilidad es algo que se debe cuidar, proteger y disfrutar con toda la familia, además la casa la tenemos a unos 30 minutos de Tapachula”, expresó.

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Destacó que la región del Soconusco está en un lugar privilegiado y se tiene que disfrutar de lo que ofrece, ya que tiene mar, así como montaña y no se tiene que hacer grandes recorridos para disfrutar de sus paisajes y sus centros turísticos.

Recomendó a la población que aún no se ha dado la oportunidad de conocer la Casa Grande o Braun como también se le conoce que la hagan, pues no se van a arrepentir de vivir esta experiencia increíble que atrapa a propios y extraños.