Especialistas en urbanismo revelan que solo el 30% de la infraestructura de Tapachula esta pensada en la compatibilidad con las personas con alguna capacidad diferente, lo cual complica su movilidad.
Explicaron que el 70 por ciento de los edificios públicos y privados no cuentan con la infraestructura para que puedan entrar o salir fácilmente, principalmente las personas que utilizan sillas de rueda.
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Gabriel Estrada, constructor, señaló que falta mucha voluntad de parte de la autoridad federal, estatal y municipal para erradicar este problema que afecta a miles de personas con una discapacidad, “hacer construcciones con espacios especiales para las personas con una discapacidad está establecido en programa de desarrollo urbano, sin embargo, las autoridades no se apegan a este programa ya establecido”, expresó.
Acusó que no se preocupan por hacer obras pensadas para esta población, ya que ni las alcaldías municipales tienen accesos especiales para ellos.
Señaló que se debe considerar a esta población en la construcción de banquetas, calles y edificios públicos, así como privados de la ciudad, ya que falta mucho por hacer a favor de ello.
Por su parte, el ingeniero Carlos González Hernández refirió que los inmuebles gubernamentales y particulares incumplen con los requerimientos con los que debe contar una construcción que sea adecuada para la población con capacidades diferentes, “Los principales inmuebles que deben contar con rampas de ascenso y descensos para las personas con discapacidad son las oficinas de gobierno, pues ahí llegan las personas a realizar algún trámite y se topan con esta problemática”, manifestó.
Destacó que hay rampas que se han construido y están mal hechas porque pueden provocar la caída de personas que caminen con dificultad o se movilicen en una silla de ruedas.
Dijo que los inmuebles no son compatibles con las personas con una capacidad diferente es mínima en la ciudad y se requiere de ejecutar obras pensadas en esta población, “La Secretaría de Obras Públicas federal, estatal y municipal deben exigir que se cumpla con la normatividad que está en el reglamento de construcción, porque su aplicación es obligatoria”, finalizó.