La inseguridad en Tapachula sigue preocupando

La contratación de elementos privados es la mejor opción ante la falta de policías

Adrián González

  · jueves 25 de julio de 2019

Jorge Gutiérrez Franco, presidente del COCOPARCI. ///Foto: Adrián González///

Ante los índices de inseguridad que existe en Tapachula, habitantes manifestaron que es importante que tanto bancos y plazas comerciales refuercen la seguridad con elementos privados, y es que ante la falta de elementos policiacos en el municipio, el índice de asaltos a cuentahabientes y clientes que llegan a los centros comerciales, se ha vuelto las principales víctimas de los asaltantes.

Jorge Gutiérrez Franco, presidente del Comité de Consulta y Participación Ciudadana (Cocoparci) dijo que reconoció que existe una evolución en el modus operandi de los asaltantes en la ciudad, algo que anteriormente no solía suceder, por lo que actualmente tanto bancos y plazas comerciales están obligados a contratar elementos privados para proteger a sus clientes.

El también coordinador de las mesas de seguridad y justicia México SOS Región Soconusco, puntualizó que a estos establecimientos llega mucha gente con fuertes cantidades de dinero, ya sea para hacer alguna transacción bancaria o bien a realizar alguna compra, por eso deben estar obligados a tener elementos de seguridad; en Tapachula, por ejemplo, las sucursales bancarias son renuentes a contratar seguridad, y los usuarios quedan sumamente desprotegidos.

En el caso de las plazas comerciales y sus estacionamientos, el presidente de la Cocoparci dijo se las hace muy fácil evadir su responsabilidad que por políticas públicas no se hacen responsables de los daños o robos a un vehículo, postura equivocada por parte de ellos cuando es su responsabilidad y por lo tanto deben asumirla; caso contrario, el ayuntamiento tendría que obligarlos por seguridad de los clientes.

Por último añadió que el trabajo de dichos guardias privados, es impedir un posible delito y poner orden al interior de la institución, por lo que no es posible que muchos establecimientos de menor capacidad económica que los bancos o centros comerciales, cuenten con dicho servicio, tanto de seguridad privada como circuito cerrado.