Huixtla.- La ley seca que aplicó el gobierno durante este fin de año, repercutió en trabajadores del volante (taxistas), ya que versiones de ellos mismos señalan que el cierre de los antros no permitió el servicio de personas que al salir de estos establecimientos, han utilizado taxis.
Por su parte, la señora, Marta N, quien es propietaria de un bar en el barrio Santa Cruz, manifestó que en realidad, los días 24 y 31 de diciembre se vieron severamente afectados por la falta de recursos económicos, debido que el gobierno les estableció la ley seca y esto no permitió la venta de bebidas embriagantes.
Apuntó que a todos los comerciantes dedicados a las ventas de bebidas alcohólicas, durante la pandemia de coronavirus, les ha ido bastante mal e incluso algunos tuvieron que cerrar sus negocios definitivamente, los que pagan una renta los más afectados.
Por otro lado, taxistas mencionaron que el cierre de bares y cantinas, también les afectó a ellos como transporte local, ya que en el caso del turno de la noche, los antros dejaron de funcionar y por lo tanto no obtuvieron pasaje en esos negocios.
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Ante esto, los trabajadores del volante, mencionaron que fue hasta hoy viernes en que comenzaron a establecerse con servicios a domicilio, dejando en claro que durante el mes decembrino, ciertamente lograron recuperarse de la economía, además han dado servicio a pasajeros provenientes de otras ciudades.
