El niño Ángel Daniel de 9 años, quien fue reportado como desaparecido hace unas horas de este jueves, ya fue localizado y está en manos de autoridades, quienes investigan el porqué habría escapado de su hogar, luego que fue rescatado por personal de Protección Civil de Tapachula tras horas de búsqueda.
El menor salió de su casa, ubicada en la colonia Xochimilco, y su desaparición generó alarma entre sus familiares y la comunidad.
Según las autoridades, tras haber sido encontradó el infante dijo que abandonó su hogar porque quería conocer la playa, un deseo que había albergado durante mucho tiempo. Sin embargo, durante las indagatorias del personal salieron a la luz algunas situaciones que denotan maltrato familiar, lo que ahora investiga la autoridad.
Hoy se sabe que Ángel Daniel, fue adoptado por una pareja, pero tras su separación, él quedó bajo la custodia del padre. Con el tiempo, comenzaron a surgir señales de maltrato de los cuales el DIF municipal estaba al tanto.
Por lo anterior, el infante fue entregado a su madre adoptiva, quien también formó una nueva familia y su atención hacia el niño disminuyó considerablemente y fue deteriorándose cada vez más, por lo que finalmente fue enviado a vivir con sus abuelos adoptivos en la misma colonia Xochimilco.
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Vecinos y familiares del niño aseguran que en el hogar de los abuelos tampoco encontró alivio, ya que continuó siendo víctima de maltratos físicos y emocionales.
Ante el grave panorama, familiares y vecinos han solicitado la intervención urgente del DIF municipal y estatal, así como de las autoridades ministeriales, para investigar los presuntos abusos que ha sufrido el menor desde su adopción.
Hasta el momento, no se ha emitido un pronunciamiento oficial por parte de las autoridades, pero la presión social ha crecido, exigiendo que se tomen medidas para garantizar la seguridad y bienestar psicoemocional de Ángel Daniel.
Se espera que en los próximos días, las autoridades locales y estatales tomen cartas en el asunto para garantizar que se haga justicia en este caso que ha expuesto una vez más la vulnerabilidad de los menores en situaciones de adopción y maltrato.