Padres de familia del jardín de niños y niñas “Sostenes Esponda Farrera”, con clave 07DJN1033Y ubicado en el cantón los Hules el municipio de Metapa de Domínguez exigen a las autoridades se les devuelvan las instalaciones de la escuela, que ha sido tomada por integrantes del sindicato de la sección VII, y que no permiten ingresar a alumnos ni a la maestra designada por la secretaría de educación para suplir a un maestro que se ausentó por motivos de salud.

En entrevista una de las madres de familia Verónica Sánchez manifestó que el ciclo escolar inició con mucho retraso debido al estado delicado de salud del maestro titular del jardín de niños y niñas, sin embargo, a solicitud de ellos, la supervisión comisionó a una maestra, lamentablemente integrantes del sindicato le impidieron su ingreso a la escuela con lo que se afecta la educación de los pequeños.

Ya fuimos al ministerio público, derechos humanos y la delegación de gobierno de Cacahoatán, pero no nos hacen caso, exigimos que nuestros hijos toman clases en su escuela.

Verónica Sánchez, Madre de familia inconforme

Lamentó, que por decisiones absurdas del sindicato ahora se esta violentando uno de los derechos universales de los niños y niñas, que es la educación pues están recibiendo clases en donde se ubica la casa de salud y comedor comunitario, por lo que no están recibiendo sus alimentos que envía el DIF a través de los desayunos escolares.

"La supervisora vino a presentar a la maestra comisionada un día miércoles, pero al lunes siguiente un grupo de maestros identificados al sindicato ya no la dejaron entrar, ni tampoco a los niños, le pusieron candado al portón y así sigue la escuela tomada". Aseveró

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Aclaró, que el maestro titular o bien el único del jardín de niños y niñas “Sostenes Esponda Farrera”, esta delicado de salud y no puede seguir frente a grupo por ello se pidió apoyo a la supervisión escolar, en ningún momento se ha dicho o expuesto otras cosas, por lo que exigen al sindicato de la sección VII sacar las manos de la escuela antes que generen un problema social mayor con la comunidad.

“No es justo que el gobierno permita a los maestros ese tipo de irregularidades ellos nada más están haciendo alborotos, los niños son los que pierden porque no reciben clases, no es posible que el gobierno no haga caso a los llamados y peticiones que estamos realizando como padres de familia”, concluyó.