Un grupo de migrantes marchó por las calles de Tapachula para pedir al Instituto Nacional de Migración (INM) que les dé un permiso para poder circular por territorio nacional y llegar a la frontera norte de México con Estados Unidos.
Los migrantes que llevan días organizándose partieron del parque Bicentenario a las oficinas de regularización migratoria, ubicadas al sur de la ciudad, que lucen vacías desde varios meses.
El contingente de aproximadamente 800 personas, está pidiendo al INM que les otorgue la Forma Migratoria Múltiple que les permita circular por territorio nacional y continuar con su travesía en busca del sueño americano.
Entre gritos de “solo migrantes, no solo delincuentes”, “manchas de sangre en las fronteras”, “alerta, alerta, que marcha la esperanza de América” y con pancartas en las que se podía leer “nos matan”, así es como marcharon por las calles de este municipio fronterizo.
El contingente salió del parque Bicentenario, lugar que sirve como albergue para cientos de personas que pasan la noche esperando para salir en caravana de Tapachula a otros puntos de la República Mexicana.
Los migrantes también llevaban cadenas en el cuello como símbolo de que están encadenados en esta ciudad y no pueden salir de Tapachula debido a las políticas de contención implementadas por el INM.
El contingente se sigue organizando para salir en caravana de Tapachula al centro del país, donde puedan obtener un documento que les permita continuar su camino sin ser detenidos por los agentes de migración.
Según el director de Pueblos Sin Frontera, Irineo Mujica, ya son más de tres mil personas las que se han registrado para participar en la caravana que partirá el lunes 30 de octubre debido a la falta de atención de las autoridades, “Si las autoridades atendieran a las personas o nos atendieran como lo hemos estado pidiendo desde hace varios días, no habría necesidad de salir en caravana. Sin embargo, es la única opción que las autoridades nos están dejando”, puntualizó.
En la marcha participaron niñas, niños, adolescentes, mujeres y hombres de todas las edades, en su mayoría provenientes del Triángulo Norte de Centroamérica, así como algunos cubanos y venezolanos que pretenden alcanzar la frontera norte del país.