Con poca afluencia en las iglesias de Tapachula inició la cuaresma con la celebración del miércoles de ceniza, cuyo rito penitencial por segundo año consecutivo a causa de la pandemia del Covid-19 se realizó con sana distancia.
El miércoles de ceniza marca el inicio de la cuaresma época de 40 días de purificación interna y concluye con el domingo de ramos con la entrada de Jesucristo a Jerusalén e inicio de la Semana Santa.
Debido a los tiempos de pandemia que aún se viven, autoridades eclesiásticas consideraron pertinente extender la oportunidad de ofrecer y recibir el rito de la imposición de la ceniza hasta el sábado 5 de marzo, de manera que todos puedan recibirla gradualmente sin hacer aglomeraciones en los templos.
Asimismo, como medida preventiva este rito se celebra imponiendo la ceniza sobre la cabeza para evitar un contacto directo entre el sacerdote con el creyente, y no en forma de cruz sobre la frente, como se practicaba en años anteriores.
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La religiosa, Nelly Hernández, fue la responsable de oficiar la ceremonia en la parroquia de San Agustín y en su mensaje informó que el periodo de cuaresma es un tiempo favorable hacer un cambio de vida, teniendo como objetivo el sacrificio de Jesús.
Expuso que la cuaresma invita a la conversión, cambiar de mentalidad, para que la verdad y la belleza de la vida no radiquen tanto en el poseer sino en el dar, no está bien en el acumular sino en sembrar el bien y compartirlo.
Señaló que el Papa Francisco invita a iniciar la cuaresma haciendo conciencia de que este tiempo constituye para todos, una oportunidad de renovación personal y espiritual, no cansarse de hacer el bien para cosechar los frutos a debido tiempo.
Por su parte, Noemi Pérez, afirmó que acuden a la celebración con devoción, ya que el principal motivo de estas ceremonias es generar un cambio de vida, y aceptar este tiempo de gracia por la voluntad de Dios.
"Hoy iniciamos la preparación de nuestra vida para recordar el sacrificio de Jesús por la humanidad y ante los tiempos que aún se viven es necesario reflexionar y agradecer a Dios por la vida", abundó.