Migrantes cubanos relatan el terror al interior de la estación migratoria Siglo XXI

Aseguran que los mismos agentes del INM les abrieron la puerta para que escaparan

 ADRIÁN GONZÁLEZ

  · sábado 27 de abril de 2019

Una mujer cubana dijo que los 10 días presa en el interior de la estación migratoria, fueron los más amargos de su vida. (Foto: Adrián González).

Cubanos aseguran que agentes de migración buscan pretextos para deportarlos

¡Era la libertad o la muerte!,

Así lo dijo una mujer cubana, que logró escapar de la estación migratoria siglo XXI del Instituto Nacional de Migración (INM) la noche del pasado jueves, tras permanecer 10 días encerradas en condiciones infrahumanas y expuestas al salvajismo y violencia psicológica de los mismos agentes del Instituto Nacional de Migración (INM).

Con lagrimas en los ojos y un cuerpo tembloroso, la caribeña expresa a este reportero el terror que vivió durante los días en que estuvo presa dentro de lo que ellos llaman “la cárcel migratoria”, en donde padeció hambre, estuvo expuesta a enfermedades respiratorias y conviviendo con otros migrantes centroamericanos, quienes tenían la instrucción de los mismos agentes, de agredir a los cubanos (hombres y mujeres).

En este sentido, desmintió las versiones que los responsabilizan de haber provocado un amotinamiento al interior de la estación migratoria, si no que fueron incitados por agentes del INM, los cuales les abrieron la puerta, esto después de que unas mujeres hondureñas intentarán atacar a las cubanas con cepillos de dientes, presuntamente por ordenes de la misma delegada de migración, Yadira del Carmen de los Santos.

Pienso que eso lo hicieron o lo organizaron para tener un pretexto para podernos deportar, porque todos los que estábamos ahí teníamos amparos o ya trámites ante la COMAR (…) Los agentes incitaron a la violencia, es más ellos mismos dejaron las puertas abiertas del patio hasta las ocho de la noche, cuando todos sabíamos que a las cuatro, ya todos debíamos permanecer dentro de esas cárceles


Por su parte, otro cubano, dijo que estas acciones tomadas por el INM en Chiapas, no son más que una violación a los derechos humanos, además de una trampa para justificar la deportación de los cubanos, lo cual no se explican porque ellos son personas de bien e incluso durante el tiempo que han permanecido en Tapachula, han contribuido a la economía local, ya sea con la renta de habitaciones de hotel, consumiendo en los restaurantes y comprando en tiendas del centro.

Declaró que al momento del amotinamiento, no había ningún policía a su alrededor “la decisión de salirnos se da cuando las mujeres hondureñas que estaban ahí, comenzaron a amenazar a las cubanas que las iban a apuñalear con los cepillos de dientes, quienes por temor salieron al patio gritando, algunas de ellas estaban embarazadas, fue en ese momento que alertaron a sus esposos que se encontraban en el área de hombres y fue que se saltaron las bardas para protegerlas, pero tampoco habían policías en ningún momento”, reiteró.

“Salgan la puerta está abierta”

De pronto, se escuchó que dijeron “salgan que la puerta está abierta”, y empezaron a salir, cubanos, salvadoreños, hondureños y el que no salió fue porque no tenía esposo, no tenía nada o dinero, declaró el cubano, quien afirmó que para salir de su país, tuvo que vender todo su patrimonio para poder juntar dinero y comprar su boleto de avión, por lo que a pesar de no tener dinero después de casi un mes dentro de la estación migratoria, prefiere estar en la calle que seguir padeciendo en la cárcel migratoria.

Destacó que en esa multitud, los niños, mujeres y hombres tienen fiebre, piojos y padecen el maltrato de los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), los cuales les roban sus pertenencias como celulares, zapatos, dinero, además de que los tratan con palabras agresivas, refiriéndose a ellos como “perros invasores”.

El caribeño a quien le costaba hablar, debido a que se encontraba enfermo por fiebre alta durante su estancia en la cárcel migratoria, pidió a las autoridades mexicanas otorgarles la posibilidad de regularizar sus papeles o en su caso pedir refugio para poder trabajar en México, aunque tienen temor, porque muchos de los encarcelados, fueron citados con engaños de que su documento estaba listo, cuando en realidad se trataba de una trampa para detenerlos y apresarlos.

Finalmente, los cubanos que se dieron a la fuga, afirmó que se mantendrán en el anonimato y escondidos hasta que puedan regularizar sus documentos o solicitar refugio a la Comar para poder trabajar en México, ya que su deseo no es regresar a la isla, y en caso de hacerlo, tendrán que vivir en la miseria, pues todo cubano que regresa deportado es tratado como traidor a la traición, además de ser encarcelado hasta por seis años por haber abandonado su país.