Migrantes, principalmente de Haití que se encuentran varados desde hace meses en Tapachula han desplazado de espacios de venta a comerciantes mexicanos en el centro de la ciudad, quienes temen quedarse sin único sustento para sus familias.
Y es que de acuerdo a las autoridades de la Secretaría de Servicios Públicos son alrededor de 300 migrantes que ejercen la venta informal en el primer cuadro de la ciudad, quienes comercializan frutas, verduras, comidas, ropa, peinados, artículos de aseo personal, entre otros.
El secretario general de la federación regional de la CTM, Armando Escobar Pérez, afirmó que los migrantes se han apoderado de espacios de venta que décadas han ocupado las familias tapachultecas y que ha sido su única fuente de ingreso.
Dijo que los migrantes se colocan con carretillas llenas de diversos productos, por lo que representan también una competencia desleal, por lo que los ingresos de los comerciantes mexicanos se ha desplomado de manera considerable.
Señaló que se presume de que existen líderes detrás del comercio informal migrante ya que ofertan una gran cantidad de productos, cuando muchos no cuentan con recursos económicos, pero se aprovechan de la necesidad de los extranjeros.
Reconoció el trabajo que ha realizado el Ayuntamiento de Tapachula a través de la Secretaría de Servicios Públicos para atender el comercio ambulante propiciado por lo migrantes, sin embargo, actúan de manera violenta.
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"Estamos conscientes de que tienen necesidad, sin embargo, deben respetar las leyes, ya que están afectando la fuente de ingreso de muchas familias que por años se han dedicado al comercio en el centro, bajo la autorización de las autoridades", abundó.
Mencionó que por parte de la CTM trabajan en la actualización del padrón de comerciantes que siguen vigentes en la actividad para coadyuvar con las autoridades en el reordenamiento de la venta ambulante y con ello contribuir en mejorar la imagen del centro de Tapachula.
Por su parte, María López, comerciante de verduras en la 5a poniente, indicó que las ventas en los últimos días se han desplomado de manera considerable ante el gran número de migrantes que ofertan productos en carretillas frente a los espacios que por años han ocupado.
Detalló que anteriormente llegaba vender hasta dos mil pesos al día, pero apenas alcanza los 500 pesos, originado porque los migrantes se colocan adelante de ellos, ofertando los mismos productos, situación que afecta la economía de su familia
"Los clientes ya no llegan hasta nuestros puestos porque los migrantes están adelante de nosotros, ofertando los mismos productos, lo que representa una competencia desleal, ya que ellos no tienen ningún permiso.
Asimismo, Flory Morales, comerciante de ropa, puntualizó que anteriormente los migrantes solo vendían con sus mismos connacionales, pero ahora ya le venden a los mexicanos porque ofertan todo tipo de verduras.
Subrayó que a través de la venta ha logrado cubrir las necesidades básicas de su familia, pero ahora con el incremento de los vendedores extranjeros el panorama es cada vez más complicado, por lo que es necesario un reordenamiento.