En Tapachula, un promedio de 20 cuerpos de migrantes de diferentes nacionalidades que han perdido la vida por diversas causas se encuentran en el Servicio Médico Forense, indicó Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana A.C.
Señaló que la mayoría de los migrantes que han perdido la vida en la frontera sur tendrán que ser enterrados en la fosa común, ya que nadie reclama sus cuerpos o quedan irreconocibles por la forma en que pierden la vida.
“Yo estuve en el hospital y hay muchos migrantes de los cuales varios pierden la vida por distintas enfermedades que traen o adquieren en esta ciudad; se van a la fosa común porque no hay manera de reconocerlos”, expresó.
Añadió que muchos de los migrantes son víctimas de delitos, mueren en accidentes o son atropellados en su travesía al caminar por la carretera Costera de Chiapas. Además, algunos pierden la vida por estar involucrados en actividades delictivas.
El activista considera que el mayor número de migrantes muertos se encuentra en Tapachula, superando cualquier dato que tanto las autoridades como él puedan tener, sobre todo por el tema de las ejecuciones del crimen.
Precisó que los migrantes no son reclamados por la falta de recursos para poder darles una cristiana sepultura, y por tal razón terminan en la fosa común de los panteones de esta ciudad fronteriza que concentra a miles de migrantes.
“La población de Haití es la más vulnerable; muchos vienen desde sus países con enfermedades, problemas de alimentación y, en Tapachula, viven en condiciones infrahumanas, lo que los lleva a enfrentar más problemas de salud, incluso falleciendo en las calles”, abundó.
Puntualizó que muchos migrantes mueren luchando por alcanzar el llamado sueño americano, con la esperanza de poder ayudar a sus familiares que se quedaron en su país y mejorar sus condiciones de vida