El Instituto Nacional de Migración (INM) dio a conocer que del primero de enero al 15 de octubre se han detenido a un total de 315 traficantes de personas (polleros) en la ruta migratoria del sur al norte del país, la cual utilizan miles de migrantes para llegar a los Estados Unidos.
Los más de 300 detenidos quedaron a disposición del Ministerio Público por el delito de tráfico de personas y lo que resulte de las investigaciones que realizarán las autoridades federales.
Se llevaron a cabo un promedio de 31.5 detenciones de traficantes de personas por mes, realizadas por las autoridades federales, quienes buscan combatir este delito a lo largo de la ruta migratoria de la República Mexicana, que presenta un incremento en el flujo migratorio.
El INM explicó que se llevaron a cabo distintos operativos y acciones coordinadas con autoridades federales y estatales que permitieron detener a los delincuentes que trasladaban a migrantes extranjeros con estancia irregular en México con el fin de llevarlos a la frontera norte.
De la misma manera, se colaboró en la incautación de 339 unidades de transporte utilizadas para cometer este delito, poniendo en riesgo la vida de las personas que son transportadas de manera ilegal por territorio nacional.
Se detalla que van desde automóviles tipo sedán hasta tráileres con cajas secas adaptadas con dobles pisos o con aditamentos para evitar que el contenido de sus contenedores pudiera ser visto mediante Rayos X.
Los traficantes de personas fueron ubicados en Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Coahuila, Tabasco, Tlaxcala, Nuevo León, Campeche, Puebla, San Luis Potosí, Jalisco, Sonora y Baja California.
En tanto, las unidades de transporte fueron ubicadas en: Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Coahuila, Tabasco, Nuevo León, Tlaxcala, Campeche, Estado de México, Puebla, San Luis Potosí; Yucatán y Sonora.
Cabe recordar que el titular del INM, Francisco Garduño, reconoció que los traficantes de personas manipulan tanto a las personas que incluso los propios mexicanos están siendo utilizados sin necesidad de ser coaccionados para llegar a la frontera norte de México.
Por su parte, el Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova acusó a los propios agentes del INM de realizar acciones de coyotaje al extorsionar a los migrantes con cantidades superiores a los 200 dólares en cada puesto de control que va de Tapachula a Arriaga.