Fueron tres intentos que realizaron las autoridades federales para contener a la caravana que partió el sábado, pero fracasaron por lo que pernoctan ya en Mapastepec, y mañana se espera que salgan y busquen llegar al municipio de Pijijiapan.
Durante los tres intentos de contención, al menos unas 100 personas fueron aseguradas por los agentes de migración y la Guardia Nacional, mientras otros escaparon por caminos de extravío pero la mayoría logró llegar a Mapastepec.
Por los aseguramientos hay familias separadas; mientras otros hombres y mujeres resultaron lesionados en los enfrentamientos dados esta tarde de lunes entre las fuerzas federales
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Llegaron disminuidos a Mapastepec
Hasta este momento, el grueso de la primer caravana ha avanzado más de 106 kilómetros desde que salió de Tapachula con la mira de llegar a la frontera Norte o a los Estados Unidos en busca de una lograr una mejor vida.
En medio de lágrimas, madres clamaban piedad a los agentes federales que lograron detener a un centenar que fueron subidos a los autobuses y camionetas del INM pero que se prevé sean expulsados directamente del país, tras haberse quedado rezagados y ser detenidos.
El grupo mayor que logró superar la reyerta arribó cerca del las 16:45 horas a Mapastepec, entre los que hay hombres y mujeres lesionados, algunos que llegaron descalzos y otros llorando luego que fueron separados de familiares tras haberlos perdido de vista en el encontronazo con los agentes y federales.
La fuerza de tarea de las autoridades fue de al menos 300 elementos de Migración, Guardia Nacional y del Ejército Mexicanos, seis autobuses, ocho unidades migración y ocho unidades de las fuerzas castrenses.
El otro bloque pernoctó en Huixtla
El segundo contingente que se movilizó este lunes desde Tapachula con 200 personas y al que se fueron integrando migrantes sumando casi 600 ya está en Huixtla en donde pasará la noche y buscarán avanzar en su travesía este martes llevando como destino Mapastepec.
Ahí hay familias completas con niños, embarazadas y hombres de todas las edades. Ahora descansan en el domo del parque del barrio Guadalupe y fueron asistidos con agua y algún alimento por la iglesia católica San Francisco de Asís.