Migrantes que están varados en el municipio de Suchiate se disputan a empujones y golpes los asientos que otorga el Instituto Nacional de Migración para trasladarlos a Tapachula o a la capital de Chiapas (Tuxtla Gutiérrez).
Los empujones e intercambio de golpes ocurrieron cuando una de las personas se quiso meter en la fila sin respetar a los que ya tenían dos días esperando que migración los traslade de Suchiate a Tapachula o Tuxtla Gutiérrez.
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Los migrantes dieron a conocer que pasan un promedio de hasta cinco días esperando en el parque central de Suchiate en condiciones inadecuadas, principalmente para los niños que acompañan a sus padres en esta travesía.
Explicaron que es difícil estar en el parque, ya que no pueden dormir por estar vigilando que no les pase nada, pues en las noches en el municipio se escuchan muchos balazos y motos que andan de un lado a otro, lo que provoca temor.
Señalaron que es mucha la burocracia en México para que los dejen pasar por su territorio, a diferencia de otros países como Honduras y Guatemala que lo hacen sin ningún problema.
Destacaron que este es un tema que se ve todos los días para poder tomar un asiento, porque hay personas que apenas llegan al municipio y quieren ser los primeros en salir cuando ya hay una lista de espera.
Precisaron que son un promedio de 300 a 400 migrantes los que están esperando ser atendidos por las autoridades del INM para poder seguir su camino a los Estados Unidos y mejorar sus condiciones de vida y las de su familia.
De ese lugar salen un promedio de seis a ocho unidades de migración con un promedio de 20 a 25 personas de diferentes nacionalidades que son trasladadas a Tapachula para iniciar su proceso de regularización.