El creciente problema del comercio informal y el ambulantaje en el centro de Tapachula es problema que no se podido erradicar en la ciudad, pues administraciones y viene sin poder terminar con este problema, señaló Elmer Aquiahuatl Herrera, presidente de la Asociación de Comerciantes Establecidos y Propietarios de Inmuebles (ACEPITAP).
Comentó que esta situación deja a los empresarios establecidos en desventaja, ya que deben afrontar una serie de compromisos económicos como el pago de rentas, salarios de empleados, seguro y otros gastos operativos, mientras que los vendedores ambulantes no están sujetos a estos mismos costos.
Aseguró que el ambulantaje representa un beneficio para unos cuantos, lo que dificulta que las autoridades tomen medidas para erradicar o reubicar a estos vendedores del corazón de la ciudad.
"Es evidente que hay intereses detrás de la permanencia del ambulantaje en el centro, lo que impide una solución efectiva al problema que afecta a los que pagamos todos los impuestos y permisos para poder trabajar", expresó.
Añadió que como empresarios han sugerido en múltiples ocasiones que existen espacios donde el ambulantaje podría ser reubicado sin afectar a los negocios establecidos en el centro de Tapachula. Sin embargo, este problema siga sin resolverse, a pesar de los compromisos que han hecho diferentes administraciones municipales a lo largo de los años.
Aquiahuatl Herrera, explicó que muchos vendedores ambulantes aprovecharon las temporadas como el regreso a clases para ofrecer mochilas, cuadernos y otros artículos escolares, lo que disminuyó significativamente las ventas en los comercios formales que operan en el centro de la ciudad.
El presidente de la ACEPITAP, mencionó que cuando el ambulantaje ha sido retirado temporalmente en el pasado, se ha observado un aumento en las ventas de los negocios establecidos del centros de la ciudad.
"Hemos visto que cuando se controla el ambulantaje, nuestras ventas mejoran, aunque depende del giro del negocio. Incluso, muchos clientes nos han dicho que no sabían que vendíamos ciertos productos, pues se meten a los negocios a comprar y no toman lo que tienen a la mano", comentó.
Indicó que la falta de control sobre el número de personas que venden en las calles, así como sobre los productos que ofrecen es problema grave para los negocios establecidos, ya que se puede encontrar una variedad enorme de productos.
Finalmente, Aquiahuatl Herrera, hizo un llamado a las autoridades para que tomen medidas concretas y efectivas que permitan regular el comercio informal en Tapachula y brindar un entorno más justo para los comerciantes establecidos, quienes siguen luchando por mantener sus negocios en un mercado cada vez más competitivo de manera irregular.