La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), pidió a los migrantes no usar a niñas y niños para pedir dinero en la vía pública de la ciudad, ya que es peligroso para ellos y atenta contra su integridad.
La CEDH ha detectado que los menores son utilizados para pedir monedas en los semáforos e incluidos que los andan cargando los padres bajo los más de 36 grados de temperatura y una sensación térmica de 40 grados, lo cual los puede deshidratar, darles un golpe de calor o provocar desmayos.
Milton Ordóñez Rodríguez, visitador especial de migrantes de la CEDH, indicó que es preocupante que se atente contra la niñez y sus derechos humanos, por ello piden a los padres no poner en riesgo la vida de los menores migrantes.
“A los niños se les ve en los semáforos o lavando parabrisas y eso es peligroso por el tráfico, así como por la ola de calor que se presenta en la ciudad, principalmente al medio día que es insoportable y la deshidratación es más”, expresó.
Añadió que cuando ven a un menor en situación de calle le preguntan dónde está el papá y por lo regular están acostados, por ello, se acercan a ellos y les piden que cuiden a sus hijos, de lo contrario puede llegar la Procuraduría de la Defensa de la Familia del DIF Estatal o Municipal y se los pueden quitar.
Reveló que donde hay un menor pidiendo la mendicidad o trabajando hay un adulto que los está explotando, pues se han detectado casos en diferentes puntos de la ciudad en donde han intervenidos las autoridades de protección al menor.
“Hay personas que ayudan a los menores, les consiguen ropa, zapatos, los cuidan y los padres les quitan las cosas para que los menores estén descalzos pidiendo monedas en las calles o los parques”, abundó.
Comentó que el año pasado se dio el caso de que tres menores fueran rescatados y regresado a su país de origen, ya que habían sido sacados sin consentimiento de alguno de los padres y eran utilizados para pedir monedas.
Detalló que muchos menores que llegan a la ciudad lo hacen en caravanas y en muchas de las ocasiones ya no recuerdan cómo regresar a sus casas, por ende, se trabaja con los consulados para realizar los retornos asistidos.
Puntualizó que cuando no hay ningún familiar de los menores migrantes que están en situación de calle en Tapachula, son las procuradurías de Protección de los Menores quienes se hacen cargo de ellos.