La reciente orden ejecutiva emitida por el presidente Joe Biden es una medida electoral más que una solución efectiva para atender la migración e impactará en la frontera sur por la cantidad de personas que llegan en busca de alcanzar los Estados Unidos, indicó Irineo Mujica, director de Pueblos sin Fronteras (PSF).
Reveló que el 80 por ciento del electorado de los Estados Unidos no está de acuerdo con las políticas migratorias de Biden, y ahora el mandatario norteamericano busca ganarlos con esta medida, que únicamente afecta a los migrantes que solicitan asilo en ese país.
Señaló que estas leyes son inhumanas y contraproducentes, pues no abordan las causas reales de la migración y podrían violar leyes internacionales de derechos humanos, ya que los solicitantes pueden ser regresados a la frontera sur con Guatemala o a la frontera norte con Estados Unidos.
“Los solicitantes de asilo no van a ser escuchados, serán regresados a las fronteras de México y prácticamente la comunidad migrante será entregada al crimen organizado o la violencia que hay en las fronteras del territorio nacional”, expresó Irineo Mujica.
Añadió que en Tapachula los migrantes han pedido un promedio de 17 mil solicitudes en lo que va del año, pero con esta medida del presidente de los Estados Unidos, el número de personas que pidan asilo podría incrementarse y se llenarían las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) como en los años 2022 y 2023.
Mencionó que las personas no están siendo regresadas a su país de origen y serán “tiradas” en las fronteras de México, donde hay secuestros, asesinatos y abusos de grupos criminales, así como de las propias autoridades.
Precisó que esta orden ejecutiva de Joe Biden fuerza a los migrantes a esperar en condiciones inseguras y precarias en la frontera sur y norte de México, lo cual podría tener graves repercusiones para su salud física y mental.
“Los países vecinos, particularmente México, podrían enfrentar una mayor presión al tener que gestionar el incremento de migrantes rechazados o en espera de asilo. Esto podría tensar las relaciones bilaterales y poner a prueba los recursos y la infraestructura de estos países”, especificó el director de Pueblos Sin Fronteras.
Señaló que estas políticas del presidente de Estados Unidos ponen en peligro la vida de miles de personas que llegan a las fronteras de México, con la intención de ingresar al país norteamericano.