En su mensaje dominical, el obispo de Tapachula Jaime Calderón, habló respecto a la polémica que se ha suscitado en torno a los libros de texto gratuitos para el inicio del ciclo escolar, y dejó en claro que educar es una responsabilidad de todos, principalmente de los padres de familia.
Dijo que, por ello, el Papa Francisco en el año 2019 propuso un pacto educativo global como una iniciativa en este campo, con la finalidad de mejorar la calidad educativa, formar mejores personas y comunidades más fraternas, y construir juntos una aldea por un mundo mejor.
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Señaló que es importante cultivar juntos el sueño de un humanismo solidario, que responda a las esperanzas del hombre y el diseño de Dios, y no dejar todo en manos de los libros del texto gratuito, que, si bien coadyuvan en el desarrollo intelectual, pero la responsabilidad sigue siendo de los padres.
"Querida familia diocesana no nos sumemos al impulso ciego de las descalificaciones, sino elevemos la mirada más allá de esta polémica y juntos como sociedad comprometámonos en la construcción de un mundo mejor, más humano e incluyente y más cristiano", sostuvo.
Indicó que se requiere de un pacto que anime los procesos educativos formales e informales, que no puedan ignorar de que todo en el mundo está íntimamente conectado y que se necesita encontrar a partir de una sana antropología otros métodos de entender la economía, la política, el crecimiento, y el progreso.
Asimismo, la acción propositiva y confiada abre la educación hacia una planificación a largo plazo, que no se detenga en lo estático de las condiciones, de este modo se tendrán personas abiertas responsables y disponibles para encontrar el tiempo para la escucha, el diálogo y la reflexión.
Enfatizó que también se requiere formar personas disponibles que se pongan al servicio de la comunidad, ya que este es un pilar de la cultura del encuentro, el cual significa inclinarse hacia quién tiene necesidad y tenderle la mano, sin cálculos, sin temor, con ternura y comprensión, como Jesús se inclinó a lavar los pies a los apóstoles.
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