En el marco de la jornada de oración mensual por la paz en este 2023, el obispo de Tapachula Jaime Calderón Calderón, pidió a la familia diocesana orar por la seguridad y la libertad de los periodistas, quienes ven amenazada su vida por el ejercicio ético de su actividad profesional.
Indicó que la labor de los periodistas es cada vez más peligrosa en México, por ello es necesario encomendar ante Dios y a la Virgen María a quienes con profesionalismo salen todos los días para informar con veracidad los hechos más relevantes que suceden en el país.
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Dijo que como obispos ya se habían pronunciado en el proyecto global de pastoral, afirmando que todo el pueblo de Dios en su conjunto están llamados por el bautismo a trabajar por la reconstrucción de la paz, a ejercer el sentido profético ante esta situación, no solo anunciar con el testimonio el proyecto de Dios.
Señaló que se debe denunciar con valor las injusticias y atropellos que se cometen dejando de lado los temores y egoísmos, muchas veces aún a costa de la propia vida, como ha sucedido con periodistas y defensores de los derechos humanos, líderes sociales laicos y sacerdotes.
"Unidos celebremos a Cristo y pidamos por aquellos y aquellas periodistas que dan su vida por anunciar la verdad, Santa María de Guadalupe, Reina de la paz, ruega por ellos en este día en que nos unimos en oración por todos los profesionales de la comunicación en el país" abundó.
Por otro lado, el obispo hizo mención acerca de la asamblea diocesana, cuyo encuentro diocesano se acerca poco a poco, por lo que rogó para que cada día se intensifiquen las oraciones por esta intención, ya que solo caminando con el impulso del espíritu Santo se puede evitar ser espectadores de un estancamiento infecundo de la iglesia.
"Solo bajo el impulso de un deseo vehemente de conversión personal, comunitario y pastoral hacia Jesús y el proyecto humanizador de su reino, podremos caminar hacia el horizonte de Dios, y solo poniendo a Jesús cada vez más al centro de la familia parroquial y diocesana podemos aspirar a una renovación profunda, porque solo bebiendo y viviendo de esta verdad será una iglesia creíble", finalizó.
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