La liposucción es un tipo de cirugía estética que retira el exceso de grasa para mejorar la apariencia corporal y pulir los contornos corporales irregulares, algunas veces este procedimiento se denomina contorneado corporal.
Mediante esta cirugía se puede extraer grasa acumulada en diferentes zonas del cuerpo: papada, brazos, mamas, abdomen, nalgas, caderas, muslos, rodillas o tobillos. En ningún momento debe pensarse que se trata de un tratamiento contra la obesidad, sino una técnica para moldear el cuerpo mediante la eliminación del tejido adiposo sobrante y en ocasiones incluso reinyectando parte del mismo en zonas donde puede ser necesario
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Se deben conocer unos puntos fundamentales antes de tomar la decisión de someterse a un procedimiento estético, puntos que serán clave en el éxito del mismo
Un buen comienzo es buscar información sobre el cirujano plástico, debes asegurarte que el médico posea una especialidad en cirugía plástica, indaga sobre sus años de experiencia y, muy importante, cuántos años lleva realizando el procedimiento que te interesa
Existen varias técnicas para remodelar el cuerpo, pero la más segura y efectiva es la lipoescultura, ésta elimina el exceso de grasa corporal, ya sea conectada a un aspirador o a una cánula, ya que de esta manera se obtiene un resultado más proporcionado.
Debes mantener una dieta sana y equilibrada, ya que esta intervención no va a sustituir a las dietas para la reducción o el control de peso. Para mantener los resultados a largo plazo, se ha de mantener un peso adecuado.
Si eres una persona fumadora, es conveniente dejar de fumar antes de la intervención. Este consejo no es solamente una recomendación general, sino que, antes de una intervención quirúrgica, la persona fumadora va a tener tejidos menos oxigenados, lo que aumenta las posibilidades de complicaciones.
Ciertos medicamentos interfieren en la coagulación de la sangre, cualquier tratamiento farmacológico que se esté tomando debe ser conocido por el cirujano, quien recomendará al paciente si se debe retirar antes de la intervención o se puede seguir tomando.
La anestesia durante la liposucción dependerá de las zonas a tratar, pudiendo ser local, local con sedación o general y siempre controlada por un anestesista.
Se recomienda reposo en el propio domicilio entre las primeras 24 y 48 horas, la vuelta a la vida normal se realiza a los 3 o 4 días: trabajo, estudios o actividades cotidianas
Los resultados comienzan a ser más visibles hasta en el 85 % de los casos a partir del tercer mes y los definitivos o permanentes lo son a partir de entre seis y doce meses
Este es un procedimiento quirúrgico que tiene riesgos y puede implicar una recuperación dolorosa, la liposucción puede tener complicaciones graves o en casos raros mortales, por lo cual debe pensar cuidadosamente acerca de la decisión de someterse a esta cirugía.