Elementos de la Policía Federal, Policía Militar y del Instituto Nacional de Migración (INM), irrumpieron la tarde de ayer martes con una fuerte redada en contra de ciudadanos cubanos que permanecen hospedados en hoteles de Tapachula.

En respuesta a este operativo que causó movilización policial y el descontento de pobladores, los hoteleros de Tapachula reaccionaron y señalaron que se trata de una violación a los derechos humanos de los migrantes y de trato indigno a los propietarios de hoteles y pensiones en la localidad.

Isabel Villers Aispuro, empresaria del ramo hotelero en la localidad, expuso, que junto a sus demás compañeros dedicados a este ramo han iniciado una serie de llamados a líderes sociales para que se agende una cita con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y se exponga la situación por la presencia de migrantes que se vive en la frontera sur.

Nos indigna el trato que les dan a colegas hoteleros, porque llegan con uso de fuerza como si ellos fueran protectores de delincuentes y sabemos que no es así; son gente que se dedica a trabajar en este ramo tan importante para la región, sabemos quiénes trabajamos todo el día y toda la noche y las autoridades saben quiénes son los delincuentes.

Apuntó, que el gobierno federal anunció al inicio del ingreso de caravanas migrantes empleo para 80 mil extranjeros, sin embargo, la realidad en la frontera sur es otra y se ha llegado a una escala donde se infunde la indignación y la falta de respeto hacia empresarios, pobladores y los más vulnerables, los migrantes.

En el operativo efectuado primeramente en la 9ª avenida Norte y 5ª calle Oriente de Tapachula, los militares y policías sitiaron el perímetro para poder sacar a algunos cubanos de un hotel ante el reclamo de los vecinos que exigían se retiraran del lugar.

“La situación que viven nuestros colegas y la realidad en esta parte del mundo con los migrantes deja a México muy mal parado ante las demás naciones”, sentenció la lideresa hotelera.

Antes cuando hacían operativos pedían la lista de huéspedes, ahora se meten, tocan la puerta en todas las habitaciones, incluso, sin ser personas migrantes y eso causa indignación; las revisiones son bienvenidas, pero no de esa forma”, agregó.

En el operativo fueron detenidos al menos 20 cubanos, que según las autoridades del INM, no contaban con algún permiso para prevalecer legalmente en el país.

Los policías federales intentaron en todo momento evitar la labor de reporteros y personas que se acercaban a grabar o intentar documentar el hecho.

Luis Villagrán, activista defensor de derechos humanos, señaló también, que se está sembrando pánico y una militarización en la frontera sur y lejos de ayudar a que los extranjeros fluyan o se les respeten sus derechos humanos, todos los días se les violentan a la vista de todos.

La redada duró cerca de una hora y después los gendarmes y soldados se retiraron rápidamente del lugar.