Ante los recientes casos de intoxicación y denuncias de alumnos por la venta de brownies y galletas mágicas o de la risa que contienen droga, principalmente marihuana en algunas escuelas preparatorias, padres de familia exigen la presencia de elementos de seguridad en los centros escolares.
José Antonio Chol, integrante del Consejo local de padres de familia de Tapachula, afirmó que la sociedad, los padres de familia, pero sobre todo las autoridades no deben hacer oídos sordos a las denuncias que existen, toda vez que se han registrado ya en la localidad casos de, con las sospechas que estuvieran relacionadas con drogas.
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Dijo que las denuncias de los alumnos son comunes, sin embargo, ante el temor de represalia por parte de quienes se dedican a la comercialización de los pastelillos y galletas, o de sus propios compañeros que son consumidores, estas no llegan a las autoridades educativas ni de seguridad y justicia, pero es necesario que se hagan las investigaciones correspondientes.
"Para nadie es un secreto la venta de droga en las escuelas preparatorias, los antecedentes están en los registros, en Tapachula han sido detenidos cerca de centros escolares a vendedores de droga, incluyendo a menores de edad", abundó.
Expuso que la situación es preocupante ya que las estadísticas y estudios nacionales señalan que un alto porcentaje de los niños y adolescentes que se iniciaron en las drogas lo hicieron por medio de brownies, muffins, hot-cakes, paletas de dulce y palitos de chocolate alterados con marihuana o cocaína.
Por su parte, Alfredo de Cruz Cordero, presidente de la asociación Nueva Generación Vinculación Social, indicó que es necesario que el gobierno atienda el problema de inseguridad que se vive en las escuelas, ya que se ha detectado la venta de drogas, por lo que es necesario redoblar las acciones de vigilancia tanto al interior como al exterior de los centros educativos.
Detalló que es necesario y responsabilidad de la autoridad la instalación de cámaras de video en los centros escolares, cuya responsabilidad es de las autoridades educativas y no de los padres de familia cómo está ocurriendo en la Federal 1, donde a los padres se les ha exigido aportar 5 pesos cada 15 días.
Puntualizó que es necesario que regrese la policía escolar a las instituciones de Tapachula, cuyos elementos coadyuvaban en el tema de seguridad, por ello, seguirán alzando la voz para que se atiende este problema que azota en los centros educativos.
Asimismo, exigió la intervención de la SEP, de la Secretaría de Salud, y de las corporaciones de seguridad, para supervisar y vigilar la vendimia en el interior de las escuelas, que revisen las bebidas y que la Coordinación Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios esté siempre atenta de todo lo que ingresa a los planteles para el consumo de los estudiantes.
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