El estado de Chiapas se ha conmocionado con la muerte de Paola Yazmín, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado jueves en la cisterna de la escuela donde trabajaba.
Este caso es similar al de la joven regiomontana Debanhi Escobar, quien desapareció frente al motel Nueva Castilla, en el kilómetro 15 de la carretera que va de Monterrey a Nuevo Laredo, en el Estado de Nuevo León y dos semanas después su cuerpo apareció flotando en una cisterna de ese mismo motel.
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Durante los primeros días del mes de diciembre, Paola Yazmín asistió a la escuela primaria David Gómez, ubicada sobre la 12 poniente, del barrio Magueyito, en Tuxtla Gutiérrez. Ahí laboraba desde hace 13 años como portera e intendente, y fue en ese lugar en donde habría mantenido contacto recientemente con algunos compañeros de trabajo.
Su hermana la vio por última vez alrededor de las 7:30 horas del pasado 7 de diciembre, en el Fraccionamiento Moctezuma, momento en el que salió de su hogar para dirigirse al centro educativo.
Paola era originaria del municipio de Venustiano Carranza, pero al crecer se trasladó a Tuxtla; tenía 36 años, era de tez morena, de complexión delgada, media 1.67 metros y pesaba 40 kilos, de acuerdo con los datos de su ficha de desaparición proporcionada por la Fiscalía General del Estado.
Como señas particulares tenía el cabello teñido, al hombro, sus ojos eran de color café obscuro, boca mediana y de nariz recta. Tenía una cicatriz en el lado derecho del labio y tatuajes en la parte trasera del cuello, en los tobillos, en el antebrazo izquierdo y en la muñeca izquierda. Todos estos elemento ayudaron a identificarla el día del hallazgo.
Sus familiares habían iniciado una intensa búsqueda mediante imágenes en diferentes plataformas digitales y en la Fiscalía General del Estado, sin tener respuesta.
La mañana del jueves 8 de diciembre fue localizado su cuerpo en el interior de una cisterna en su centro y comenzaba un calvario para sus seres queridos.
Fue el personal que labora en la institución, quien al realizar sus labores cotidianas intentaban sustraer agua del depósito de cemento, cuando observaron un cuerpo flotando, por lo que de inmediato dieron aviso a la dirección y éstos a su vez a la Secretaría de Educación.
Rubén Ruíz Saldaña, supervisor de la zona, señaló en ese momento que la mujer fue vista por última vez la mañana del pasado miércoles 7 de diciembre en las instalaciones y ya no se supo nada de ella, hasta que apareció en la cisterna.
"Era muy buena, siempre nos ayudaba, la veíamos en los salones, en los baños, y a la hora de la salida. Cuando venían por nosotros nos iba a llamar y nos traía al portón, pero muy buena gente", dijo Eliseo N, estudiante de 6 años.
Doña PatricaN menciona que Paola Yazmí era la que estaba de encargada cuidar la salida y entrada de los alumnos, "era muy seria, siempre con semblante fuerte, casi no cruzaba palabras, pero era muy querida por los padres, no tenía hijos, era muy reservada".
El cuerpo fue sacado por la parte trasera de la institución y de inmediato fue ingresado a una camioneta y trasladado al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.
Cuerpos de emergencia señalan que el cuerpo no presentaba heridas visibles. Por su parte, la Fiscalía General del Estado, a través de la Fiscalía Contra Feminicidio, inició una carpeta de investigación en contra de quien o quienes resulten responsables por el delito de Feminicidio.
El día de hoy docentes de la Escuela Primaria David Gómez, de la zona escolar 055 de Tuxtla Gutiérrez, marcharon por calles de la capital chiapaneca para exigir justicia por Paola Yazmín.
El Observatorio Feminista contra la Violencia a las Mujeres de Chiapas registra hasta setiembre de 2022, un total de 132 muertes violentas de mujeres: 45 de las cuales están contempladas como feminicidios.
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