Abandonado y sin un proyecto para su restauración, el parque Francisco Sarabia mejor conocido como el “Parquesito de la Estación” actualmente luce deteriorado y convertido en un verdadero centro de vicios, a pesar de que a escasos metros se encuentre una caseta de policías, quienes hacen caso omiso a la serie de irregularidades que se dan todos los días, principalmente por las noche.
La influencia de lo que se comercializa y tira todos los días a la vista de la población en general, ha sido un factor por el cual muchos tapachultecos han dejado de ir a realizar sus compras al mercado Soconusco, por lo que locatarios se quejaron de bajas ventas e incluso algunos han abandonado sus “puestos” ya que no se generan ganancias, solo pérdidas monetarias.
Desde años el parque ha sido un nido de delincuentes y un basurero al aire libre, por lo que es importante que las autoridades municipales y estatales se organicen para organizar un proyecto que permita la rehabilitación de este lugar histórico que fue construido de manera conjunta con la antigua estación de trenes.
Denis Olivera Aguirre, locatario del mercado Soconusco
Añadió que desde el traslado de los grupos de migrantes del parque central a la estación hace unos meses fue el detonante para que las personas dejen de ir a visitar ese lugar, y aunque actualmente estos grupos ya no se encuentran en la zona, la gente se quedó con la mala imagen y el temor de ser asaltados, ya que se han registrado casos de personas que han sido víctimas de la delincuencia como robos de vehículos y de los llamados “carteristas”.
El locatario afirmó que a unos meses de que se cumpla el primer año de presidente de Óscar Gurria Penagos, a la fecha el flamante edil no ha cumplido con su palabra de mejorar la imagen urbana de lo que es toda esa zona, mismo que se niega a recibirlos, muy al contrario cuando se encontraba en plena campaña política, pues se trataba de conseguir sus votos ciudadanos en las urnas.
Cabe señalar que las áreas verdes del parque se encuentra un enorme cumulo de basura, además de una parte de infraestructura de las bancas cayó, lo que representa un peligro para la gente que camina todos los días por las banquetas, ya que se abrió un boquete el cual es utilizado como vivienda.