Personal de Protección Civil Estatal y Municipal implementaron recorridos de prevención en los principales mercados públicos de Tapachula, que durante las ventas fiestas decembrinas se convierten en una bomba de tiempo debido a la venta indiscriminada de pirotecnia.
El director de Protección Civil de Tapachula, Julio César Cueto Tirado, afirmó que esta dependencia no expide, ni otorga, permiso alguno para la comercialización y venta de juegos o artefactos pirotécnicos, ya que de acuerdo a la última reforma publicada en el Diario Oficial de la Federación el 19 de enero de 2018, artículo 5, Fracción 1, la única autoridad competente es la Secretaría de la Defensa Nacional.
Dijo que tampoco PC es la autoridad responsable de realizar los decomisos de los productos de pólvora, por lo que solo de verifica que los comercios cumplan con las medidas de seguridad para mitigar riesgos por mal usos y manejo de la pirotecnia.
Señaló que se mantiene una estricta vigilancia en los mercados para evitar cualquier accidente o explosión, tal y como ha sucedido en otros Estados del país, en donde debido al mal manejo de estos productos se han registrado incendios que no solo han ocasionado pérdidas materiales sino también de vidas humanas.
Detalló que se supervisa que los comercios cuenten con un extintor, una cubeta de agua, una cubeta de arena, señalamientos de no fumar, que mantengan despegadas las salidas de emergencia y rutas de evacuación, no mantener los productos expuestos al sol, no almacenar grandes cantidades de estos productos y no saturar de conectores los multicontactos, entre otros.
Enfatizó que durante los recorridos se constata los riesgos y se emiten los reportes necesarios a la Secretaría de Defensa Nacional, para que donde haya una concentración excesiva de cohetes o bodegas clandestinas se pueda decomisar para evitar perdidas de vidas humanas.
Finalmente mencionó que en casa de que los comerciantes incumplan con las medidas preventivas necesarias se tomarán otras acciones más drásticas, ya que no permitirán por el mal manejo de estos productos se ponga en riesgo la vida de las personas que acuden a los mercados públicos.