Sectores sociales critican al acuerdo contra la Inflación y la Carestía anunciado por el gobierno de México, que consiste en un proyecto en el que participan 15 empresas de productos básicos que tiene el objetivo de combatir los altos niveles de la inflación, sin embargo, las organizaciones aseguran que, de nada servirían algunos ajustes, cuando lo que se gana con el salario mínimo es insuficiente para el sustento diario.
El plan propone que el precio máximo de la canasta básica sea de mil 39 pesos y también la congelación de algunos precios, para disminuir su escalada y entre los productos y servicios que no subirán sus precios son las gasolinas, ya que se seguirá el apoyo con subsidios; así también la harina de maíz, en la que los empresarios se comprometieron a que el producto que le venden a las tortillerías sea en promedio 3 por ciento menos al actual, y las tarifas de las autopistas concesionadas, que no subirán hasta el 28 de febrero del 2023.
Ante esta situación, el presidente de la asociación Nueva Generación Vinculación Social, Alfredo de la Cruz Cordero, indicó que, de nada sirven estas medidas, si no se ven reflejadas en el poder adquisitivo de las familias a través de los salarios, ya que el incremento de precios en los productos de la canasta básica es muy superior a lo que se aumenta en el salario mínimo.
Dijo que, lo que tiene que pasar una familia para llevar el sustento diario a su casa es cada vez más difícil, y al momento de ir por la despensa, se da cuenta que no lleva todo lo que necesita, debido a que las verduras, el pollo, la leche, el aceite, los cereales o los huevos cada día suben de precio sin control.
Señaló que, la petición de las organizaciones civiles es que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, voltee los ojos al campo, ya que el gobierno importa los productos básicos como el maíz y el frijol, lo que encarece en perjuicio al consumidor final que son los ciudadanos.
Detalló que otro de los aspectos por la que las familias tienen una creciente necesidad económica es la falta de empleo, ya que no hay ningún tipo de inversión que promueva la economía local.
La dirigente de Mujeres en Movimiento por la Liberación Nacional, Isabel Méndez Hernández, lamentó que el gobierno carezca de una estrategia para enfrentar la carestía inflacionaria, ya que la canasta básica ha incrementado un 30 por ciento y se prevé que en los dos meses que faltan para terminar el año, el aumento sea aún más por lo que puede llegar a ser insostenible para las familias,
Indicó que este incremento perjudica la economía de las familias, que en su mayoría viven al día con un sueldo mínimo, ya que no alcanza para cubrir las necesidades básicas de alimentación, gastos en la escuela, ropa y el pago de los servicios como el agua, luz y el gas.
Aclaró que no están en contra de los apoyos sociales que, supuestamente, vienen a solventar las necesidades de la población como los adultos mayores o las personas discapacitadas, pero eso no basta para poder subsistir, pues este recurso no se reproduce, y la mayoría de la población no alcanza el beneficio.
Estimó que, es importante que, en lugar de vanagloriarse con ese apoyo, el gobierno debería ver la posibilidad real de bajar el precio de los productos de la canasta básica, ya que es ahí donde el esfuerzo, verdaderamente beneficiaría a las familias de esta región de Chiapas.