Dato: 19 toneladas fueron enviadas al país europeo
Bajo estrictos protocolos sanitarios y con medidas adecuadas para prevenir el Covid-19, productores del Soconusco agrupados en el Centro Agroecológico San Francisco de Asís (CASFA), exportaron 19.5 toneladas de cacao orgánico fermentado, cosechado en huertas del Soconusco a Francia
El coordinador de Capacitación y Agroecología del CASFA, Iván Román Noriero dio a conocer, que la empresa europea Choc-hola adquirió el grano fermentado cultivado en sistemas agroforestales Mocaya en biodiversidad nativa del Soconusco, lo cual beneficia a unas 300 familias cacaoticultoras de la región.
Dijo, que por su calidad, sabor y aroma, el cacao del Soconusco ha logrado posicionarse en países como, Canadá, España, Bélgica, Japón y Francia, por lo que cada año se exportan alrededor de 100 toneladas de semilla, lo que representa un abanico de oportunidades para el productor, ya que le permite tener mejores ingresos.
Señaló, que actualmente en la región hay 300 productores de cacao orgánico con un universo de mil hectáreas dedicadas al cultivo de unos de los productos milenarios de la región, extensión que abarca 13 municipios de la costa, sierra y soconusco, donde el sello característico es que son cultivados de manera agroforestal.
Detalló, que cuidar su proceso de producción es altamente importante, desde la parcela hasta el fermentado en barricas de roble blanco y secado al sol, para obtener la mejor calidad, es decir un aroma y sabor único de sus granos. “Esta calidad está relacionada con las variedades criollas, así como el proceso de fermentación, los cuidados a la hora del secado y el almacenamiento”, subrayó el especialista.
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Román Noriero enfatizó que con este modelo de producción orgánico, Chiapas sigue encumbrándose en las bondades de los sistemas de cultivo agroecológicos que la Red Maya de Organizaciones promueve en la región Soconusco, para obtener niveles de competitividad regional que permitan incrementar los ingresos de los cacaoticultores.
Para finalizar mencionó, que acreditar identidad, tradición y cultura en el territorio del Soconusco puede fortalecer la productividad de la región cacaoticultora, especialmente en difíciles escenarios de competencia con otros países de Latinoamérica y es que la denominación de cacaos finos de aroma es algo reconocido por la Organización Internacional del Cacao, de la que México está ausente desde 1993.
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