/ sábado 23 de octubre de 2021

En pleno libramiento de Huixtla, la piedra encantada de los chimanes

Brujos visitan por las noches el lugar para depositar veladoras con diferentes imágenes, mismas que usan para sus "trabajos" incluyendo la de la Santa Muerte


Huixtla.- Pocas personas lo sospechan pero, a orilla de carretera en el pleno libramiento de Huixtla, hay una piedra a las que algunos lugareños conocen como "la Piedra encantada" el motivo es que ha sido elegida por personas de este y municipios aledaños, que practican la brujería y han seleccionado este lugar para para poner velas que les ayuden a que los "trabajos" de brujería que realizan tengan más "potencia".

Según nos cuenta Juan Manuel N, originario de Aquiles Serdán de este municipio, desde hace más de 10 años que él ha acudido a la cueva de la piedra que está ubicada en márgenes de la carretera libramiento Huixtla-Villa Comaltitlán, para pedir a sus deidades ayuda, sin embargo, él nos aclara que sus "trabajos" únicamente son para hacer el bien, aunque al lugar acuden también personas que trabajan "lo malo".

Cada 2 de noviembre, en el lugar es posible ver a algunos brujos que acuden al sitio aprovechando que en esa fecha la tradición dicta que el velo entre vivos y muertos se hace más sutil, por lo que realizan trabajos que pueden ser actos de maldad para dañar a otras personas o "atar a un desencarnado" a sus deseos.


Leer más: Don Miguel, el huixtleco sanador de problemas amorosos


Si alguien siente curiosidad, podría acercarse a la Piedra encantada e inmediatamente bajo la cueva tendrá a la vista vasos de veladoras con imágenes de santos, incluyendo la Santa Muerte, Lucifer, San Judas y San Simón, entre otros, además de que hay botellas de aguardiente, algunos moños en color rojo y, en ocasiones, fotografías.

Juan Manuel explica que algunas de estas fotografías tienen agujas ensartadas con dibujos en forma de cruz, lo cual presume es para dañar a esas personas de las fotos, dijo que si alguien siente curiosidad podría acudir al lugar, aunque recomendó que mejor no lo hagan o que sea bajo su propio riesgo, pues si no tienen cuidado podría ser que se le "pegue" alguno de los trabajos de mal que luego se hacen en el lugar.

Como brujo, dijo que él se prepara también igual que otros para ir cada 2 de noviembre a la Piedra encantada como una forma de agradecer a los espíritus que lo ayudan, dice que hay quienes han intentado destruir el sitio, personas de la religión o simplemente gente con temor del lugar, por eso los brujos lo vigilan para que no sea dañado por gente que no sabe del tema, pues para él y sus compañeros brujos este sitio es un altar.


Materiales para la brujería/ Foto: Amílcar García | Diario del Sur



Huixtla.- Pocas personas lo sospechan pero, a orilla de carretera en el pleno libramiento de Huixtla, hay una piedra a las que algunos lugareños conocen como "la Piedra encantada" el motivo es que ha sido elegida por personas de este y municipios aledaños, que practican la brujería y han seleccionado este lugar para para poner velas que les ayuden a que los "trabajos" de brujería que realizan tengan más "potencia".

Según nos cuenta Juan Manuel N, originario de Aquiles Serdán de este municipio, desde hace más de 10 años que él ha acudido a la cueva de la piedra que está ubicada en márgenes de la carretera libramiento Huixtla-Villa Comaltitlán, para pedir a sus deidades ayuda, sin embargo, él nos aclara que sus "trabajos" únicamente son para hacer el bien, aunque al lugar acuden también personas que trabajan "lo malo".

Cada 2 de noviembre, en el lugar es posible ver a algunos brujos que acuden al sitio aprovechando que en esa fecha la tradición dicta que el velo entre vivos y muertos se hace más sutil, por lo que realizan trabajos que pueden ser actos de maldad para dañar a otras personas o "atar a un desencarnado" a sus deseos.


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Si alguien siente curiosidad, podría acercarse a la Piedra encantada e inmediatamente bajo la cueva tendrá a la vista vasos de veladoras con imágenes de santos, incluyendo la Santa Muerte, Lucifer, San Judas y San Simón, entre otros, además de que hay botellas de aguardiente, algunos moños en color rojo y, en ocasiones, fotografías.

Juan Manuel explica que algunas de estas fotografías tienen agujas ensartadas con dibujos en forma de cruz, lo cual presume es para dañar a esas personas de las fotos, dijo que si alguien siente curiosidad podría acudir al lugar, aunque recomendó que mejor no lo hagan o que sea bajo su propio riesgo, pues si no tienen cuidado podría ser que se le "pegue" alguno de los trabajos de mal que luego se hacen en el lugar.

Como brujo, dijo que él se prepara también igual que otros para ir cada 2 de noviembre a la Piedra encantada como una forma de agradecer a los espíritus que lo ayudan, dice que hay quienes han intentado destruir el sitio, personas de la religión o simplemente gente con temor del lugar, por eso los brujos lo vigilan para que no sea dañado por gente que no sabe del tema, pues para él y sus compañeros brujos este sitio es un altar.


Materiales para la brujería/ Foto: Amílcar García | Diario del Sur


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