La política humanitaria implementada por los gobiernos federal, estatal y municipal debe priorizar respeto a las leyes tanto para los migrantes como de parte de ellos y no estar por encima de los intereses y reclamos de la sociedad tapachulteca que vive en la intranquilidad y zozobra ante el incremento de la delincuencia en la que evidentemente participan extranjeros que se han colado en las caravanas.
En entrevista el doctor en leyes y presidente del colegio de abogados del soconusco, Manuel de Jesús Márquez González, reconoció que México no puede estar ajeno a la política humanitaria y de solidaridad de respeto a los derechos humanos como parte de una sociedad internacional, pero se tiene que voltear a ver la demanda de la población que exige seguridad y tranquilidad.
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“Las policías preventivas tanto municipal como estatal como las federales deben trabajar en un plan de seguridad que incluya al sector social, adaptarse a la realidad y condiciones de esta frontera sur, no es que la autoridad este desatendiendo su trabajo la realidad es que no hay un plan de seguridad construido con la participación de las organizaciones productivas de la región y esto es urgente porque pareciera que solo se avocan al tema migratorio y no de seguridad”, expresó.
"Hoy se oferta empelo y se promocionan logros por dar trabajo a los extranjeros, pero para los locales que también lo necesitan no hay respuesta y mucha gente de aquí está migrando porque no encuentra oportunidades.
Afirmó, que es necesario aplicar la ley a quienes no la respetan sean mexicanos o extranjeros, trabajo de inteligencia porque hay mano negra en bandas delictivas que manipulan para crear incertidumbre en la zona, esto lo vemos en la Estación Migratoria, en las calles, parques y mercados con insurrecciones, con el incremento de venta de droga a los jóvenes, mujeres prostituyéndose sin ningún control y eso es peligroso.
“En Tapachula tanto en los nacionales como en los extranjeros hay gente buena que busca trabajo y mejorar sus condiciones de vida, vivir honestamente, a esos hay que apoyarlos, pero a los delincuentes hay que combatirlos”, concluyó.