Durante la presente temporada de estiaje, el número de hectáreas que han sido arrasadas por incendios, tanto del área forestal y de tulares ha disminuido en comparación al mismo periodo del año pasado, sin embargo, los riesgos de que se susciten siniestros son latentes debido a las altas temperaturas que se presentan en la zona.
El Coordinador contra incendios forestales de la Conafor, Andrés Cabrera Trinidad, dio a conocer que hasta el momento se han registrado 7 incendios forestales y se tiene un registro aproximado de 70 hectáreas, entre forestales y tulares las que han sido consumidas, de los cuales 60 por ciento han sido provocados por la actividad humana.
Dijo que en compararon al mismo periodo del 2020, se ha tenido una disminución, ya que el año pasado se llevaban 20 incendios forestales con más de 300 hectáreas afectadas, esto gracias a los trabajados preventivos que se han realizado en las comunidades.
Señaló que lamentablemente la caza furtiva, sigue siendo la principal causa de incendios forestales, ya que 4 de los 7 incendios que se han registrado han sido provocados por esta actividad ilegal, donde las personas por intentar capturar casquitos, iguanas, armadillos y demás animales utilizan fuego.
Detalló que la mayor cantidad de hectáreas afectadas se encuentran en la Reserva de la Encrucijada, por lo que han reforzado la vigilancia con corporaciones policiacas con el fin de evitar las prácticas ilegales que ponen en riesgo esta zona natural protegida.
"Seguimos trabajando en la prevención y el combate de incendios forestales, ya que las condiciones climáticas que se presentan aunado a las actividades ilegales aumentan los riesgos de incendios, nos preocupa porque faltan los meses más críticos de la temporada", sostuvo.
Finalmente mencionó que la mayor parte de las áreas incendiadas son de tulares, es decir vegetación nueva, que una vez que se registran las lluvias vuelven a brotar, sin embargo, no dejan de ser importantes porque ponen en peligro a la fauna y flora de la zona.