Habitantes de la zona rural de Tuxtla Chico protestaron este martes ante presuntas irregularidades y corrupción del ayuntamiento que encabeza Deysi Lisbeth González Aguilar a quien acusan de recortar el presupuesto destinado a una obra de pavimento mixto y con ello la extensión del Camino al Roble en la Sección La Toma.

Los campesinos, hombres y mujeres inconformes han acudido en varias ocasiones a la presidencia municipal para buscar dialogar con la alcaldesa pero la situación ha sido la misma, ya que les informan que anda en la capital del Estado, sin embargo, rara vez se le ha visto en el edificio municipal, ya que los mismos trabajadores aseguran que quienes manejan los asuntos relevantes son René y Eliseo González Pérez, padres y tío de la presidenta municipal, a ella solo les llevan los documentos a firmar a su casa.

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Los inconformes acudieron al edificio municipal ante la negativa de ser atendidos por la alcaldesa o por el titular de obras publicas, por lo que decidieron plantarse en las entradas, allí en entrevista Heriberto Tovar Salazar expuso que hay inconformidad porque se había destinado un monto de más de 4.5 millones de pesos para la comunidad, pero extrañamente de 2.5 kilómetros que se pavimentarían solo se pretende hacer 150 metros, lo que es no solo una burla sino un despojo y robo del dinero del erario público.

Señaló que la comunidad hizo la gestión y logró la aprobación de la obra y el presupuesto, pues se trata de un camino muy importante, que da salida y acceso a más de cien familias de esa comunidad, así como a la escuela, además de que por allí transitan vehículos que transportan las cosechas de las comunidades en la zona cercana al rio Suchiate.

Sin embargo, extrañamente el camino sigue en mal estado y sin una explicación de porque se pretende acortar el tramo de pavimentación mixta que actualmente es un camino en mal estado, pero no hay respuesta la autoridad se esconde, por lo que aseguraron que tomarán otras medidas para que les cumplan.

Pidieron al Gobierno del Estado su intervención, que haya una auditoría sobre el destino de los recursos para Tuxtla Chico, piden que René González Pérez, padre de la alcaldesa, saque las manos del presupuesto y lo trate de utilizar para su campaña política, ya que es el actual candidato del Partido Encuentro Social (PES), a la presidencia de Tuxtla Chico.