A más de un mes de que el quiosco, ubicado en el parque central Miguel Hidalgo, sufriera un deterioro en su infraestructura que amenaza con caer, habitantes que circulan en la zona, solicitaron a las autoridades municipales, el acordonamiento inmediato para prevenir a las personas y no se acerquen en caso de que colapse en cualquier momento.
Raúl Castro, comerciante del primer cuadro de la ciudad, reconoció que desde un principio en que se detectó esta anomalía, personal de Protección Civil municipal acudió para la instalación de cintas amarillas de prevención, sin embargo cuando llegaron las caravanas de migrantes, estas fueron retiradas por ellos mismos.
En este sentido, a pesar de que las caravanas se han marchado de la ciudad, actualmente no existe ningún señalamiento, lo que representa un verdadero peligro para todas las personas que se acerquen al quiosco, ya que realmente desconocen las condiciones, al menos que lo observen detalladamente.