Venezolanos, guatemaltecos, colombianos, salvadoreños, cubanos y guatemaltecos junto con la diocesis de Tapachula llevaron a cabo la procesión celebrando a nivel mundial la jornada del migrante y refugiado.
El Reloj Floral fue el punto de reunión en donde los participantes llevaron sus banderas alusivas a sus paises de origen, muy contentos por el apoyo brindado por parte la Iglesia Católica que sabe de sus necesidades y que además están de paso buscando una mejor calidad de vida.
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Entre 400 a 500 migrantes han sido atendidos proporcionándoles un lugar de hospedaje y alimentación, en lo que realizan sus trámites para buscar la salida legal del país, la mayoría de ellos por el mal gobierno, pandillas, secuestros, no hay empleo por lo que que buscan prosperar, ademas de sensibilizar a la sociedad de que son hermanos migrantes que se sientan acogidos, dándoles acompañamiento, buscar la concientización a traves de la fe. La Iglesia Católica busca evitar el rechazo social junto con la discriminación.
En entrevista ante medios de comunicación el padre César Augusto Cañaveral Pérez director diocesal de albergue Belén detalló que es la edición 110, ya que se hace cada año esta procesión y termina con una eucaristía, asimismo pide que exista mas paz en Chiapas, que haya inclusión con los hermanos migantes, ya que ellos hacen todo lo posible por brindarles techo, comida, asesoramiento legal y junto con ayuda psicológica.