En la víspera de las festividades decembrinas, la iglesia evangélica hizo un llamado a las familias a fortalecerse y mantenerse unidas, ante los fenómenos sociales que persisten, principalmente en relación a la inseguridad, las adicciones, la corrupción y la falta de oportunidades para las nuevas generaciones.
El pastor del ministerio Amor Fraternal, José Rivas, afirmó que las fiestas navideñas ayudan a hacer una conversión en los seres humanos hacia valorar los lazos familiares y olvidar viejas rencillas para llegar a la reconciliación, sin embargo, aclaró que, en todo momento, el alcohol debe estar fuera de estas convivencias familiares.
Indicó que, el 2023 ha sido un año difícil, lleno de necesidades a causa de la movilidad humana en esta frontera sur y por el rezago económico a causa de la pandemia, no obstante, los asuntos deben ponerse en manos de la espiritualidad para que el próximo año se visualicen condiciones positivas para las personas.
Aseguró que los gobernantes tienen un papel fundamental para que la situación de las personas mejore, por ello, pidió que este escenario navideño sirva para la reflexión de quienes dirigen los destinos de las comunidades, haciéndose una autocrítica de lo que han hecho hasta ahora, y ofrezcan un mayor esfuerzo por el bien de la ciudadanía.
Asimismo, puntualizó que es fundamental que en las fiestas decembrinas y de año nuevo, las personas se conduzcan con prudencia, para evitar situaciones lamentables como accidentes, desencuentros familiares y adicciones en el consumo de alcohol, por ello, dijo que es importante que no se pierda el motivo de la festividad navideña con la instauración de la familia.
"Hacemos el llamado a la población para que en esta época navideña se puedan fortalecer los valores y lazos entre los miembros de las familias, ya que es en este lugar en donde se debe comerzar a trabajar para lograr un cambio en la sociedad", abundó.