Los retenes policiacos en los que se busca extorsionar a los turistas, se han convertido no solo en un dolor de cabeza sino también en una de las causas principales por las que muchas personas deciden ya no venir a Tapachula.
Considerando que desde el momento en que se permite a un vehículo ingresas al país es porque trae sus documentos en regla, el hecho de que en cada retén los vuelvan a revisar raya en el hostigamiento, afirmó el colectivo Unidad Ciudadana.
Tránsito del Estado y Vialidad Municipal deberían ser tolerantes con el turismo y en lugar de infraccionarlos les hicieran únicamente una amonestación verbal en caso de una falta no grave.
Fidel Aguilar, Integrante del Colectivo Unidad Ciudadana.
Uno de los integrantes de este colectivo que reúne diversas representaciones de organismos productivos Fidel Aguilar, señaló que los retenes policiacos a lo largo de la carretera Talismán-Tapachula y Suchiate-Tapachula, ahuyentan al turismo guatemalteco.
Una vez que al vehículo le está autorizado el ingreso al país al pasar por la Aduana, es porque trae el conductor sus documentos personales y de la unidad en regla. Entonces no nos explicamos porque en todos esos retenes los tienen que estar deteniendo para hacer las revisiones al vehículo y a los documentos personales del conductor, así como de sus acompañantes”, expresó.
Dijo, que es preocupante que esas medidas en carretera provoquen molestias en los visitantes porque son excesivas las revisiones y se ha visto la disminución de guatemaltecos, situación que repercute severamente en la economía de los comerciantes, principalmente del primer cuadro de la ciudad.
En lugar de coordinar estrategias para ofrecer mayor seguridad en Tapachula, se hacen otras cosas que lejos de beneficiar a la población, únicamente están generando pérdidas económicas.