Albergues del sur de Chiapas reportan un sobrecupo en sus instalaciones, debido a los constantes flujos de migrantes que arriban por la frontera con Guatemala, en busca de escalar hacia la frontera norte.
Sólo en las últimas cuatro semanas, personal del Albergue Jesús El Buen Pastor, ha tenido que habilitar espacios para poder dar cabida a los extranjeros que llegan a tocar las puertas. En la recta final del año, este refugio con aforo para unas 800 personas reporta lleno con hasta 1,600 migrantes.
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En el caso de la Casa del Migrante, ubicada en Tecun Umán, a unos cuantos pasos del río Suchiate, también se reporta ocupación al máximo, debido a que organismos internacionales como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), ha dejado de brindar apoyo como anteriormente lo hacía con los flujos de extranjeros varados en la frontera sur.
Según un grupo de venezolanos que arribó a la Acnur , la negativa por parte de esa instancia ha orillado a que estos extranjeros tengan que pagar por hoteles baratos y ahora no tengan más dinero para desembolsar.
“Hay ciertos criterios que la Acnur sigue para poder apoyar a las personas, en eso estamos de acuerdo; nosotros ya tenemos resuelto nuestro estatus con la Comar, pero ni así nos quisieron apoyar”, puntualizó Rodrigo Avelar.
El Albergue Jesus El Buen Pastor , a cargo de Olga Sánchez, realiza un esfuerzo sobre humano para tratar de dar cabida a los extranjeros, que buscan un sitio para descansar y permanecer por algunos días, pero hace falta que sistemas municipales y el propio DIF en sus tres órdenes de gobierno, se involucren en las tareas de atención a la comunidad migrante.
Venezolanos, cubanos, haitianos y centroamericanos son vistos en sitios públicos como el parque central Miguel Hidalgo y colonias de Tapachula, durmiendo en las calles y jardineras en espera de poder movilizarse en caravanas pequeñas o algún medio que pueda trasladarlos al estado de Oaxaca.