La presión de las actividades de la humanidad en las últimas décadas ha impuesto un mayor ritmo de intensidad a la explotación de los recursos naturales, lo que ha llevado a la degradación de los ecosistemas naturales y al crecimiento de los volúmenes de residuos que se emiten al aire y se depositan en la tierra y en las aguas nacionales.
La Secretaría del Medio Ambiente e Historia Natural (SMAHN) confirma de acuerdo con un monitoreo de calidad del agua y aire del Laboratorio de Monitoreo Ambiental, qué las principales causas del deterioro ambiental son el calentamiento global, la reducción de la biodiversidad, el agotamiento de los recursos naturales, la escasees de recursos y los efectos negativos en la salud.
De acuerdo con el padrón de empresas con licencia de funcionamiento en materia de emisiones a la atmósfera son 68 en Chiapas se ubican en Ostuacán, Mapastepec, Palenque, San Cristóbal de Las Casas, Tuxtla Gutiérrez, Tapachula, Villaflores, Puerto Chiapas, Comitán de Domínguez, Venustiano Carranza, Chiapa de Corzo, Berriozábal, Arriaga, Reforma, Huixtla, Ocozocoautla de Espinosa, Acapetahua, La Trinitaria, Frontera Comalapa, Ciudad Hidalgo, Huixtla y Metapa.
Existen diversas amenazas para las aves principalmente derivadas de las actividades humanas, la amenaza más importante es la alteración del hábitat, la introducción de especies invasoras y exóticas, el comercio y la cacería legal e ilegal, los fenómenos naturales, el cambio climático, los incendios forestales y los conflictos sociales, precisa en su página web.
Mientras que la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidos, explica que durante este año 2022 los incendios forestales causaron un fuerte impacto en los ecosistemas de Chiapas, se registraron 234 siniestros que afectaron 34 mil 634.97 hectáreas mucho más que el año pasado cuando se quemaron en 145 incendios, 21 mil 706.86 hectáreas, la diferencia es de 12 mil 929.11 hectáreas, este tipo de daños abona a la pérdida de recursos naturales, a la degradación de los suelos.
En el Área de Protección de Recursos Naturales La Frailescana, se presentaron 33 incendios con una superficie afectada de 4 mil 593.83 hectáreas en el Parque Nacional Cañón del Sumidero se registraron 12 incendios forestales que afectaron 261.1 hectáreas, en la Reserva de la Biosfera La Encrucijada ocurrieron 34 incendios que afectaron mil 819.8 hectáreas.
En la Reserva de la Biosfera La Sepultura se tiene un registro de 74 siniestros donde se afectaron 10 mil 855.4 hectáreas, en la Reserva de la Biosfera El Ocote se presentaron 6 incendios con daños en 148 hectáreas y en el Parque Nacional Lagos de Montebello un incendio afectó 0.45 hectáreas.
A la vez, 160 ocurrieron en Áreas Naturales Protegidas, con afectaron en 17 mil 670.13 hectáreas, donde existe una gran diversidad de especies de flora y fauna, muchas especies de animales se afectaron por la pérdida de su hábitat; 16 mil 964.84 hectáreas corresponde a superficie siniestrada fuera de las Áreas Naturales Protegidas, es decir, en pastizales, lotes baldíos, zonas urbanas y rastrojos.
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Un estudio del monitoreo poblacional del pavón en la Reserva de la Biosfera El Triunfo y Reserva de la Biosfera Volcán Tacaná precisa que la pérdida de la cubierta forestal ha ocasionado un aumento en la erosión de los suelos, en la planicie costera del pacífico se ha identificado la apertura de canales intercosteros, la agricultura y ganadería extensiva, la construcción de asentamientos humanos irregulares en la zona de playa y la extracción no controlada de árboles de mangle.
En la Sierra Madre de Chiapas para las reservas de la Biosfera El Triunfo, La Sepultura y Volcán Tacaná este proceso se ha acrecentado en las últimas décadas, también se ha degradado y fragmentado, explica el estudio en los alrededores del Parque Nacional Cañón del Sumidero, Centro Recreativo El Capital y Cerro Mactumactzá, en Tuxtla Gutiérrez, Suchiapa, Chiapa de Corzo.
Lo mismo en la región Altos de Chiapas donde ha aumentado el cambio de uso del suelo de zonas con vocación forestal a la apertura de la frontera agrícola, las amenazas de contaminación y deterioro incluyen asentamientos humanos irregulares en la Reserva de la Biosfera Montes Azules.