Tapachula, Chiapas.- En la frontera sur de Chiapas el Instituto Nacional de Migración (INM), con el apoyo de los agentes de la Guardia Nacional han reforzado los operativos para asegurar a migrantes que no cuentan con su legal estancia en el país, además de incrementar los aseguramientos de personas que son transportadas de manera clandestina hacia el centro y norte del país.
Aunque el fenómeno migratorio es añejo, en los últimos años el flujo migratorio se disparó en más del 1000% a través de las famosas caravanas, donde los migrantes son enganchados para cruzar territorio mexicano, sin acudir a realizar su trámite ante una oficina de Migración.
El INM realiza patrullajes, instala retenes de manera aleatoria y refuerza las acciones de control y verificación migratorio en los retenes fijos de la entidad, lo cual ha permitido que se incremente el aseguramiento de migrantes que pretenden burlar la acción de la justicia.
Aunque la comunidad migrante se queja de una cacería, trascendió que estas acciones buscan prevenir accidentes fatales, ya que los traficantes de humanos esconden a los migrantes en dobles fondos de vehículos pesados y tráileres, donde viajen hacinados y en condiciones infrahumanas, arriesgando su vida.
El trabajo de los cónsules con presencia en Tapachula, ha dejado mucho que desear ya que a pesar de estar en contacto permanente con el INM, no hacen el trabajo de promoción a sus connacionales para orientarlos y asesorarlos para realizar una migración, segura y ordenada, y ni siquiera están al pendiente de las quejas o solicitudes de su gente, quienes por extrañas razones prefieren emprender su viaje al margen de la ley, aun sabiendo de todos los peligros a los que se pueden enfrentar.