Debido a la turbiedad que en el periodo de lluvia genera el río Grijalva con sus afluentes, provoca al Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SMAPA) de Tuxtla Gutiérrez la suspensiones del servicio de bombeo por la gran contaminación y el azolve, toda vez que las plantas potabilizadoras alcanzan un punto máximo de 2 mil BTU, una medida inglesa, cuando se pasa de ese límite por los sólidos y lo que arrastra una corriente que han causado los 10 mil BTU, es imposible su tratamiento y con ello en este año se han generado la suspensión temporal en dos ocasiones por más de hasta 10 horas.
El director general del SMAPA, René León Farrera, explica que a la capital se le suministra 2 mil 500 litros de agua potable por segundo con 150 mil usuarios, pero existe el riesgo que a mayor precipitación, se genera más suspensiones, en este año se pronostica la etapa más fuerte de lluvias del mes de agosto a octubre, por ahora se realiza la limpieza de filtros y alimentadores en este tiempo de estiaje.
Lee también: Denuncian falta de servicio de recolección de basura en Cacahoatán
En la zona urbana de la capital, con más de 600 mil habitantes, lo que afecta es la tubería muy vieja de la red de agua potable, principalmente en el primer cuadro, de la novena sur a la novena norte, de la once oriente a las once poniente y otras colonias, en su momento se construyeron con tubos de concreto pero se han roto por el uso y se realiza un proceso paulatino de sustitución pero su costo es muy alto.
Por otra parte, el 70 por ciento de las viviendas en Tuxtla Gutiérrez están conectadas su fluvial, es decir el agua lluvia a la red de drenaje aunque no fue calculada para poder abastecerse, y con ello nos genera grandes rupturas que colapsan la red, principalmente en las partes bajas de la capital nos genera taponamientos e inundaciones o encharcamientos por agua de lluvia y drenaje, lamentablemente no hay forma de corregir.
Desafortunadamente en Tuxtla Gutiérrez no se tiene el respaldo financiero de la federación, nuestro talón de aquiles es la falta de recursos, aunque tenemos 5 mil millones de pesos en proyectos, el desafío es conseguirlos para cambiar las redes sanitarias que nos afectan y que datan de 40 y 50 años, adicional a ello tenemos un rezago de 400 millones de pesos de usuarios que no nos pagan desde hace un año el servicio de agua, que se suman a los 20 mil a 30 mil tomas clandestinas de agua potable.
En cambio el SMAPA paga a la Comisión Federal de Electricidad entre 16 y 19 millones de pesos mensuales por concepto de bombeo del servicio de agua y operación de las plantas tratadoras de aguas residuales que tratan en conjunto mil 500 litros de agua por segundo y demás instalaciones que requieren del servicio eléctrico, expone León Farrera.
A las insuficiencias financieras del SMAPA se suman los laudos por 2 mil millones de pesos, por irresponsabilidades e injusticias de administraciones municipales pasadas, que tenemos que asumir por mandato judicial y no podemos seguir causando más agravios, en tanto que las conquistas sindicales de los últimos años para los dos sindicatos son una enorme carga pero los tenemos que cumplir.
El servicio que presta el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado tiene una carga más debido a que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) le cobra por extracción de agua del río Grijalva y por el tratamiento de aguas residuales, sin embargo, se ha mantenido el abasto aceptable del servicio a la sociedad.