En el mundo laboral, la presencia de tatuajes sigue siendo un tema debatido, y en el ámbito de la salud, como el de la enfermería, las percepciones a menudo pueden influir en las oportunidades profesionales. La historia de Roberto de la Cruz Moreno, auxiliar de enfermería general, refleja el impacto que los tatuajes pueden tener en su carrera.
Con 10 años de antigüedad en el ámbito de la salud, siendo primero manejador de alimentos en el Instituto Mexicano del Seguro Social, y ya con 5 años como enfermero, Roberto compartió sus experiencias personales con respecto a sus tatuajes.
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Comenzó contando en exclusiva a Diario del Sur, que sus primeros dos tatuajes, realizados a la edad de 17 años, fueron motivados por un deseo de rebelión y aceptación en un entorno donde se sentía marginado. Aunque no eran visibles, enfrentó discriminación una vez al solicitar un puesto en una empresa refresquera, donde las políticas prohibían tatuajes, incluso si no se notaban a simple vista.
Posteriormente, durante su trabajo en el IMSS, decidió hacerse tatuajes más visibles. Aunque ha sentido miradas de desconfianza por parte de algunos pacientes, el enfermero destaca que la percepción cambia una vez que brinda atención. Su experiencia demuestra que la conexión con los pacientes va más allá de la apariencia física.
Estigma y cambio de perspectiva:
Roberto reconoce que existe un estigma persistente asociado a los tatuajes, especialmente en el campo de la salud, donde se espera mantener una imagen "correcta". Sin embargo, destaca que tener tatuajes no afecta su capacidad para brindar atención de calidad. A pesar de ser parte de un grupo de profesionales de la salud tatuados, se enfrentan a la presión social para cumplir con ciertos estándares de imagen.
Reconocer cambios en la sociedad:
Ante aquellos que aún creen que los tatuajes son sinónimo de delincuencia, Roberto insta a reconocer los cambios en la sociedad y abandonar la discriminación basada en la apariencia. Como profesional de la salud, sostiene que tienen la vocación para brindar cuidados de calidad, y la satisfacción radica en el agradecimiento de los pacientes y sus familiares.
¿Qué es la discriminación por tener tatuajes?
En términos sencillos, la Ley Federal del Trabajo prohíbe la discriminación en el ámbito laboral por diversas razones, como la condición física, social, raza o religión. Esto incluye también aspectos relacionados con la apariencia física, como los piercings o tatuajes. Jaime Rodríguez Eguiarte, socio líder en la Práctica Laboral de la firma Ibarra, del Paso y Gallego, destaca que esta normativa establece que los empleadores no pueden establecer condiciones que generen discriminación entre los trabajadores por cualquier motivo.
El artículo 3 de la Ley Federal del Trabajo especifica esta prohibición, y establece que las conductas discriminatorias pueden ser sancionadas con multas que oscilan entre los 22,405 y los 448,100 pesos. En resumen, la ley busca garantizar un ambiente laboral justo y libre de discriminación, imponiendo consecuencias económicas a aquellos empleadores que no respeten estas normativas.
