Una pareja de migrantes hondureños que integraban la caravana 2021 y que han podido burlar los cercos militares de Guatemala y México confían en poder llegar a los Estados Unidos para poder darle una mejor vida a su hijo que viene en camino y a sus cuatros hijos que se quedaron en su país.
Carlos y Sofía, narran a Diario del Sur que ellos buscaron la manera de pasar a México sin ser detectados por las autoridades de ambas naciones, pero para ello se tuvieron que separar del grueso del continente en Chiquimula, Guatemala.
“Mi esposa tiene 6 meses de embarazada y gracias Dios ya estamos en Tapachula, ahora lo que estamos pidiendo es que las autoridades de México nos puedan ayudar con nuestra visa humanitaria para que podamos seguir nuestro camino y poder llegar a los Estados Unidos antes de que nazca mi hijo”, expresó.
Ahorita estamos durmiendo en la calle y comemos de lo poco que nos regalan
Explicó, que ellos salieron de su país por la inseguridad que se vive por las pandillas y por darle una mejor vida a sus cuatro hijos que se quedaron en Honduras con sus abuelos.
Actualmente no tienen donde dormir y que ya acudieron a los albergue, así como a la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), pero no le han brindado ningún apoyo a pesar de que su esposa esta embarazada.
“Ahorita estamos durmiendo en la calle y comemos de lo poco que nos regalan los ciudadanos mexicanos de buen corazón, pues por no tener papeles no me pueden dar trabajo”, abundó.
Sofía, pidió apoyo a las autoridades mexicanas para que les facilite su visa humanitaria para poder continuar su camino y alcanzar el sueño americano para poder mantener a todos sus hijos y al que viene en camino.
“El sueño de todo los migrante, ya sea hondureño, guatemalteco, salvadoreño, haitianos, cubanos y hasta los propios mexicanos es llegar a los Estados Unidos para poder ayudar a nuestros familiares”, destacó.
Mencionó, que no le da miedo transitar la ruta migratoria a pesar de los peligros que se puede encontrar en el camino, ya que sino la mataban las pandillas, la mataría el hambre, por ende, se está arriesgando llegar a los Estados Unidos
“Se que las mujeres son violadas, asesinadas o que son capturadas por los cárteles mexicanos y obligas a trabajar con ellos, pero eso no me quita el sueño de poder llegar a los Estados Unidos", externó.
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