En el municipio de Motozintla, se ha implementado un toque de queda que comienza a las 8 de la noche y se extiende hasta las 6 de la mañana. Esta medida es una respuesta directa a los constantes enfrentamientos que se han vivido en la región, generando un clima de inseguridad y temor entre la población local.
Durante el toque de queda nadie puede estar en las calles de Motozintla, excepto en casos específicos y urgentes. Sin embargo, cualquier desplazamiento debe contar con la autorización de los grupos que mantienen los bloqueos desde la semana pasada, lo que complica la vida cotidiana de los habitantes.
“Sólo nos mandaron mensaje donde nos dicen que no salgamos después de las ocho de la noche y nos lo mandaron por Whastssap, exclusivamente a los que vivimos en Motozintla”, expresó uno de los pobladores a Diario del Sur.
Esto se puede leer en el mensaje que les están enviando a los habitantes. “Información para Motozintla; habrá paso para los enfermos, médicos, enfermeras y no queremos gente que esté en las calles, el toque de queda esta a partir de las 8:00 pm alas 6:00 am”
Lo que se busca es reducir la presencia de personas en la vía pública durante la noche, evitando así el riesgo de encontrarse en medio de los recorridos de grupos armados que patrullan la zona.
Los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado en la zona fronteriza con Guatemala se han intensificado desde la semana pasada. A pesar de ello las autoridades federales no han intervenido de manera efectiva, dejando a los pobladores en un estado de vulnerabilidad.
La vida en Motozintla se ha visto afectada por estos hechos y los pobladores con miedo, ya que todas las actividades se paralizan completamente después de las 8 de la noche e incluso las autoridades municipales han dejado de transitar por las calles.
La imposición de este toque de queda también tiene repercusiones económicas, ya que comerciantes y negocios locales han tenido que ajustar sus horarios de operación, lo que ha resultado en una disminución significativa de sus ingresos.
Los servicios de salud se mantienen como una de las pocas actividades permitidas durante el toque de queda. Sin embargo, el personal médico trabaja bajo una presión adicional, sabiendo que sus movimientos son monitoreados y necesitan autorización para atender emergencias fuera del horario establecido.
Los pobladores de Motozintla han tenido que adaptarse rápidamente a esta realidad, buscando maneras de mantenerse seguros y minimizar los riesgos, ya que la comunicación entre vecinos y cooperación mutua se han vuelto esenciales para sobrellevar los momentos de mayor tensión.
Cabe hacer mención que el presidente de México reconoció que hay movilizaciones en Chiapas, principalmente Chicomuselo, Motozintla y Frontera Comalapa, lo único que pidió a la pobladores no ayuden a ningún grupo del crimen organizado, ya que quieren tener bases de apoyo dos grupos del crimen organizado.
