Luego de dos reuniones con las autoridades estatales y municipales que no terminaron en ningún acuerdo, los trabajadores del Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tapachula volvieron al plantón afuera del palacio municipal.
Explicaron que ya llevan 28 días en paro laboral y que liberaron el palacio municipal por las reuniones, pero este día regresaron, ya que las autoridades municipales no quieren cumplir con la petición de reinstalar a sus 23 compañeros despedidos.
Juan Enrique Moreno Monzón, secretario de conflictos del Sindicato de Trabajadores al servicio del Coapatap, explicó que decidieron volver a manifestarse afuera del palacio municipal, ya que no han tenido una respuesta del organismo del municipio.
“Acudimos a Tuxtla Gutiérrez el lunes y miércoles de la semana pasada porque nos citó el gobierno estatal y ahí estuvo la presidenta Panfila Soto, así como el director del Coapatap, Julio Armando Cano Aranda, pero de nueva cuenta las autoridades no mostraron voluntad para solucionar este problema que lo propiciaron ellos mismos”, expresó.
Añadió que este conflicto laboral está en las manos de las autoridades para poder solucionarlo de forma inmediata y que su petición de regresar a sus compañeros a laborar no es negociable con nadie.
Precisaron que las autoridades están violando sus derechos laborales, económicos, sociales y lo están haciendo de forma de berrinche o capricho, pues legalmente no hay algún argumento que sustente su despido.
Destacó que los suministros para poder seguir brindando el suministro de agua potable a la población les queda para una semana y media o como mucho dos, pero eso no le preocupa a su patrón.
“En cuanto a los insumos químicos para el tratamiento del agua, si mucho, mucho tenemos para dos semanas, ya que hasta el momento los directivos no han comprado los insumos para el tratamiento del agua”, abundó.
Detalló que si las autoridades no compran los insumos, podrían tener un problema para la distribución del vital líquido ya que dejarían de suministrarlo para cuidar la salud de la y los tapachultecos.
Puntualizó que el año pasado su lucha duró 22 días y lograron que se reinstalara a sus compañeros despedidos injustamente, sin embargo, por represalia corrieron a otro grupo de compañeros que participaron en las protestas y huelga laboral.