Una pesadilla: toda la familia se infectó y ella fue internada

Es feo ver cómo tu propia familia se hace a un lado

Alejandro Gómez | Diario del Sur

  · miércoles 15 de julio de 2020

Elizabeth Escobar, sobreviviente a Covid-19. Foto: Alejandro Gómez | Diario del Sur

La soledad y estar preocupada porque a tus hijos y tu esposo no les gane esta enfermedad, es algo con lo que no se puede vivir, esto independiente del dolor que causa en ti esta enfermedad

Elizabeth Escobar, sobreviviente a Covid-19


“Esta enfermedad presenta síntomas que yo no había sentido en la vida, dolor intenso, no poder respirar, temperatura que sientes que te quema y pensar que en cualquier momento puedes morir, es una pesadilla horrible de la que quería despertar”. Esto platicó para esta casa editorial, Elizabeth Escobar, quien venció al coronavirus.

Explicó, que es feo ver cómo tu propia familia se hace a un lado, pero que lo entiende, ya que no querían contagiarse de esto que ha matado a más de 35 mil personas en el país.

“Yo no entiendo cómo hay personas que no creen en esta enfermedad, que aun viendo los muertos y enfermos siguen diciendo que es un invento del gobierno y andan por la calle sin protección. Los seres humanos somos necios y solo entendemos cuando desgraciadamente perdemos a un familiar o nos afecta a nosotros”, expresó.


Aun recibe atención de sus médicos a quien le agradece por salvarle la vida. Foto: Alejandro Gómez | Diario del Sur


La mujer de 36 años y originaria de la Ciudad de México, radicada en Tapachula y Motozintla por trabajo mencionó, que ella estuvo internada10 días en el hospital rural del IMSS de la Sierra Madre de Chiapas.

“Viví este sufrimiento el 15 mayo al 1 de junio, lo primero que pensé fue en mis tres hijas y mi esposo, ya que convivimos en la misma casa. Gracias a Dios ellos no tuvieron que ser hospitalizados, pues la enfermedad no les pegó muy duro. Quien presentó más síntomas de coronavirus fui yo”, comentó.



“La soledad y estar preocupada porque a tus hijos y tu esposo no les gane esta enfermedad, es algo con lo que no se puede vivir, esto independiente del dolor que causa en ti esta enfermedad. Cuando yo entré a urgencias en Motozintla por la dificultad para respirar, lo primero que le pedí a Dios es que me diera otra oportunidad de vida y que no permitiera que mis hijas o me esposo cayeran en cama”.

Ya fuera de peligro, Elizabeth acude a atención con el médico que le salvó la vida y curó a su familia.

“Doy gracias a Dios y a los médicos, así como a las enfermeras que luchan todos los días por salvar a pacientes a pesar de ponerse en riesgo”, enfatizó.